Fin de la tercera parte de la segunda trilogía de 'La Guerra de las Galaxias', un digno fin para un relanzamiento de la saga algo fallido. La primera parte está muy lejos de lo que se puede esperar de un cineasta con el nombre de George Lucas, por infantil y por falta de calidad y seriedad, pero se puede entender, porque probablemente sea necesario conocer la historia de Anakin desde los origenes, desde su infancia para luego ver la evolución de su personaje a lo largo del tiempo. La segunda parte resulta más bien innecesaria, muy buena en lo técnico, pero a la vez muy pobre en cuanto historia, la historia entre Anakin y Padme es necesaria en la historia de Star Wars, pero debería haberse tratado de otra manera, tal vez la solución hubiera sido adelantar esta 'Venganza de los Sith' en el 'Ataque de los clones', o lo que es lo mismo haber realizado lo mismo que se hizo con 'Harry Potter' y su último acto, dividirlo en dos partes para darle un mayor sentido épico. Porque de haber sido así probablemente el espectador se habría inmerso en la historia con mayor pasión y excitación, ya que esta tercera parte viene a ser un buen desenlace a esta parte de la historia, tiene acción, tiene historia y buenos detalles técnicos, consigue casi enamorar al público, aún sabiendas que podría mejorar.