Cuando Astrid (Danica Kurcic) recibe un inquietante llamado telefónico en su programa radial, decide retornar a su pueblo natal para investigar la desaparición de su hermana Ida (Karoline Hamm), ocurrida 21 años atrás, junto con otros 17 compañeros luego de un accidente al comenzar su viaje de egresados, en lo que constituye un retorno a un pasado traumático.

Equinox es una suerte de lámguido cuento de hadas que cruza drama familiar, thriller psicológico y elementos de folk horror en una narración que sigue a Astrid en su pesquisa del presente, a su hermana Ida en las semanas previas a su viaje y a Astrid en esa época (Viola Martinsen) , una niña de 9 años que debe enfrentar el trauma de la desaparición de su hermana.

Esta serie danesa podría haber sido perfectamente desarrollada en una película de hora y media en lugar de una miniserie. Reconozco que tengo problemas con el folk horror, que en general me mueve a risa y casi nunca puedo tomármelo muy en serio. Equinox no despliega mucha información y recién muestra la mayoría de sus cartas relevantes en sus últimos tramos, desafiando la paciencia del espectador decidido a que se le revele el enigma en varios tramos y culminando en un final que dividirá aguas.

A Ida y sus compañeros se los ve medio crecidos para estudiantes de secundaria. Acaso los personajes más interesantes sean la inquietante Lene, la madre de las hermanas, a cargo de una notable Hanne Edelund y la la Astrid niña con la odisea de sus visiones y su tratamiento.

Llama la atención la comparación con Dark, serie con la que no tiene nada que ver, ya que la alemana es un drama coral de ciencia ficción y no un drama fantástico y de terror. A Equinox sí se la puede relacionar en su premisa con la serie francesa Les Revenants, aunque no en su desarrollo.