Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de manulynk:
9
Drama. Aventuras Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Un grupo de oficiales ingleses y norteamericanos que están prisioneros en un campo de concentración nazi, se proponen organizar una fuga en la que se verán implicados doscientos cincuenta presos. Para llevar a cabo su plan comienzan a excavar tres túneles. (FILMAFFINITY)
13 de septiembre de 2011
10 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Dentro del cine bélico, se ha insertado un pequeño subapartado que es el de los prisioneros de guerra. De hecho, si pensamos en films de prisioneros de guerra y evasiones, inmediatamente nos vendrá a la mente este estupendo film. El principal aliciente a priori es el extraordinario reparto del film, que reúne un buen puñado de caras sobradamente conocidas como Steve McQueen, James Coburn, Charles Bronson, Donald Pleasance, James Garner, Richard Attenborough, etc.

El realizador John Sturges, convierte las tres horas largas de metraje en puro espectáculo que va mucho más allá del mero intento de fuga por parte de unos presos expertos en fugas. Y es que Sturges convierte el campo de concentración en un universo propio. No es la intención del realizador el ofrecernos una imagen realista de las condiciones de vida en un campo de prisioneros de guerra, sino que, grácias al amplio reparto, construye diversas subtramas, pequeñas historias con vida propia, gracias a los diversos personajes que pululan por el relato. Al mismo tiempo, el realizador ofrece unas cuantas pinceladas de humor.

Aunque todos se lucen con tiempo que les toca (algunos más que otros), McQueen es el que sabe sacarle todo el partido a un personaje que parece escrito expresamente para él (incluyendo la famosa secuencia de moto, que, seamos justos, es un mero inserto colocado para el lucimiento personal del actor). Por el lado alemán, Sturges apenas les muestra atención.

Realmente se trata de un film de complicado etiquetaje, más que un film de género es un film de "géneros". Pero en el fondo es lo de menos, durante tres horas viajamos a un campo de prisioneros lleno de tipos curiosos y compartimos con ellos sus visicitudes, nos reimos con sus ocurrencias, compartimos su comida, sus castigos, tratamos de huir con ellos, y todo ello mientras canturreamos la estupenda y pegadiza banda sonora (compuesta por el genial Elmer Bersntein). En definitiva, nos olvidamos totalmente de cualquier cosa que no tenga que ver con el peculiar campo de prisioneros. Y además sin presencia femeninia ni romances que valgan. Tal vez no sea un film "perfecto" pero como entretenimiento puro y duro, no tiene rival.
manulynk
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow