No voy a decir que Wild Wild West es una genialidad, pero la verdad es que tampoco la encuentro tan mala como dice casi todo el mundo. Es, simplemente, un film para pasar un rato entretenido sin pensar demasiado y disfrutando de unas cuantas escenas muy espectaculares. A Will smith nunca lo he tragado, pero Kevin Kline y Kenneth Branagh lo hacen genial, en especial el primero. El personaje de Salma Hayek no pinta nada en la trama y puede ser eliminado sin problema alguno. Pero, chorradas argumentales aparte, lo cierto es que te lo pasas pipa mientras la ves, aunque luego la olvides al minuto de que termine.

Lo mejor: Que entretiene
Lo peor: Que se te olvida en cuanto ha terminado, lo que no dice mucho a favor de su calidad.