Decidí ver la película no por una cuestión de morbo, sino porque estaba en mi lista de espera y había postergado su visión (en parte porque sabía la crueldad que contiene). Uno se despierta todos los días y mira en las noticias por TV, o lee en los diarios las noticias más terribles y deprimentes. Y piensas en la condición humana y te preguntas los eternos porqués. No hay respuesta que valga o satisfaga, suceden hechos violentos y sinsentido ante nuestros ojos y nada hacemos ante ello, tan solo aterrorizarnos. La verdad es que cada vez se pierde más la capacidad de asombro y vemos los hechos sangrientos como algo normal, de la vida cotidiana.

Al visionar la película y ser participe de toda esa violencia a ultranza, ese sadismo atroz, sientes cierta culpa (por así llamarlo). No creo que esa violencia sea innecesaria, nos demuestra, nos escupe en la cara lo que realmente somos (solo que la doble moral nos protege de mostrarnos tal cuál). A pesar de que sabes que la historia no es real, lo parece tanto que terminas por creerlo. Pareciera ser una nota cualquiera de la actualidad. Un amigo me pregunta: ¨¿sucedió de verdad?¨, le contesto que no, que es un falso-documental. Mi respuesta no le deja del todo convencido. Yo tampoco siento alivio al saber que todo se trata de mera ficción. La realidad me está esperando todos los días para decirme que ¨Holocausto caníbal¨ viene a ser un juego de niños con lo que ella tiene para mostrarme.