Esta serie sobre la FOX la produce... la competencia de la FOX. Eso hace que la visión que se ofrezca haya que ponerse en cuarentena. Otro condicionante es el político; teniendo en cuenta la identificación de la FOX con el conservadurismo, está claro quiénes han promovido esta visión tan negativa de esa cadena.

También hay que tener presente que lo que se relata en la serie tuvo como protagonistas a personas que firmaron contratos de confidencialidad... así que no se puede saber si son hechos reales o inventados.

Todo ello hace que, a mi juicio, la serie sea tendenciosa y manipuladora.

Dicho esto, la serie es recomendable porque descubrirá a muchos (como es mi caso) la controvertida figura de Roger Ailes. Además, el guion es muy ágil y con una tensión creciente, de hecho me he visto los siete capítulos seguidos, parando sólo para cenar. A destacar la genial interpretación de Russell Crowe.

Así pues, si dejamos a un lado la clara intencionalidad de la serie, ésta resulta tan absorbente como apasionante.