De verdad que cuando empecé a ver esta serie, me propuse no ser especialmente quisquilloso con la utilización de la magia y de ciertas incongruencias en el desarrollo de la misma, al fin y al cabo es un mundo de fantasía para todos los públicos. Sé que está basado en una serie de libros, que no he leído, y probablemente en ellos no exista el nivel de absurdo de la serie televisiva. Pero es que después de una primera temporada más o menos prometedora, las dos siguientes han sido una sucesión de estupideces sin medida. Una tras otra, se suceden escenas en las que no hay más explicación que la magia, con el problema de que esta es errática, sin normas y a conveniencia de unos guionistas que me parece que dejan mucho que desear. Las cosas son porque sí y ya está, sin más explicaciones, y para mí esto no sólo no basta, sino que no está bien.

En cuanto a la factura técnica, mi opinión no es tan mala. Los efectos el vestuario, las localizaciones etc., son bastante decentes, aunque todo esto se ve bastante empañado por unas actuaciones del reparto, en algunas ocasiones mediocres y en otras muchas pésimas.

Finalmente, repito, tenía ganas de que esta serie fuera buena (o que me gustara), pero después de la tercera temporada, sino acaba aquí, yo me bajo del viaje. No lo he disfrutado y en general me ha parecido un despropósito.