Como dicen en la propia película, pongamos las cartas sobre la mesa. Hace un par de años se estrenó directamente en plataforma, ‘Vacation Friends’ (titulada en España ‘Amigos Pasajeros’), una desternillante comedia con John Cena como gran atractivo. En su momento ya me gustó, pero ahora la he revisionado para enfrentarme a esta secuela, y debo confesar que me parece una comedia cojonuda, con un Cena pletórico, y que daba mucho más de lo que prometía.

Los críticos no estuvieron de acuerdo conmigo, ya que la suspendieron, y han vuelto a hacer lo mismo con esta segunda entrega, aunque siendo todavía más despiadados. La diferencia es que esta vez tienen toda la razón del mundo, porque estamos ante una secuela tan fallida como olvidable, y que desmerece por completo los logros de la original.

Ojo, Cena vuelve a estar increíble, confirmándose como uno de los grandes actores cómicos del momento (sí, habéis entendido bien), así como el resto del reparto, entregados a la causa y pasándoselo en grande, especialmente una hilarante Meredith Hagner. El problema es que aquí introducen a un Steve Buscemi que también se lo pasa bien, pero cuyo personaje acapara demasiado protagonismo, restándole importancia a lo que realmente importa. En efecto, me refiero a Cena, Hagner, y sus locuras como pareja.

Y es que el gran acierto de la primera entrega era su humor desfasado y el contraste entre los protagonistas, con unos personajes a los que era imposible no querer. Aquí apuestan por incorporar una serie de innecesarias novedades, para acabar siendo otra comedia de acción del montón, que no está a la altura de la original, y que sólo convencerá a los paladares menos exigentes.

La primera no era ninguna obra maestra, eso está claro, pero no sólo cumplía su cometido de divertir y entretener a partes iguales, sino que encima ofrecía mucho corazón. Aquí no queda nada de todo eso, en una comedia hecha con prisas, y que se olvida de su propia esencia. Siempre exijo originalidad a las producciones, y eso incluye a las secuelas, pero en esta ocasión quizás les habría venido genial repetir la fórmula, porque lo que han presentado al espectador, una comedia con una trama de narcos que, en vez de sumar, resta, se queda a medias de todo.

En conclusión, si os gusta Cena, quizás le encontréis el punto, pero estamos ante una secuela que peca de excesiva y prescindible, siendo un traspiés que dudo que vaya a entusiasmar a los que salieron contentos con la primera película. Lo sé, somos pocos, pero es que aquella tenía un no sé qué, que qué se yo, que aquí no está, ni se lo espera.

No creo que sea una de las peores cintas del año, pero tampoco voy a ser condescendiente, por mucho cariño que le tenga al bueno de John, porque buena, lo que se dice buena, no es, cosa que podría decir de la primera sin que se me caigan los anillos. Y es que ni Cena ha conseguido salvarla, y creo que, con eso, os lo digo todo. Una pena, pero siempre nos quedará la deliciosa primera parte.

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