LLevar al cine el tebeo "Mortadelo y Filemón" del gran Ibáñez no es tarea fácil y ha sido siempre bastante tentador. Se ha hecho varias veces en dibujos animados y dos veces en el celuloide.. Todas ellas fallidas, claro.

Es una historia mal trabada, con una sucesión de episodios, casi sin conexión; una película plana y -en algunos momentos -soporífera. Llega un momento en que sólo se arregla la gracieta con mamporros por doquier. Humor facilón, pues.

Si tuviese que resaltar algunos aspectos positivos...pues, lo tendría difícil, pero puestos a ello destacaría los efectos especiales y la labor de los actores, especialmente Pepe Viyuela y Berta Ojea. El que está mal y sobra (¡Cuánto hemos echado de menos a Benito Pocino!) es Eduardo Soto, que sobreactúa en algunos momentos y no actúa en casi todos (hace más bien de sí mismo o de neng).