Tenemos frente a nosotros a toda una candidata al Oscar.

Detroit, la nueva película de la galardonada Kathryn Bigelow tiene la clave para triunfar en los premios: un tema polémico y delicado, y obviamente bien tratado.

He encontrado "Detroit" una película más que digna, con un gran trabajo de dirección y fotografía, jugando muy bien con los planos. Sin embargo, me he llevado una leve decepción.

Con lo visto en los trailers o posters, pensé que la película iba a ir enfocada especialmente a los disturbios, y aunque durante parte del metraje es así, la gran parte de la acción ocurre en el Motel Algiers, escena, que en mi opinión se hace un poco larga. La tensión está presente, pero no termino de conectar con lo que está sucediendo.

Las actuaciones son correctas, pero no me quedo con ninguna en especial. Will Poulter, puede ser quien más destaque, pero su personaje me parece bastante complejo y en ciertas partes noté que le podía quedar grande. John Boyega, quizás la cara más conocida por su papel en Star Wars, tiene un papel mucho más secundario de lo que esperaba, siendo protagonista en la mayoría de publicidad de la película. De todas formas, cumple, y actuar en películas como estas pueden ser un gran impulso en su carrera.
Por lo demás, bastantes caras desconocidas (salvo Anthony Mackie), pero que no desentonan. Buen trabajo.

A diferencia de lo que leo, mis momentos favoritos de la película son cuando se le da un enfoque de documental, ayudando a adentrarse en los disturbios.

"Detroit", es pues un filme más que interesante, de lo mejor que se ha visto este 2017, y aunque personalmente creo que pudo haber sido mejor, se deja ver y convence.

PD: No podía acabar mi crítica sin mencionar, que gracias a Yelmo Cines, los presentes en la sala nos quedamos sin leer la mitad de los subtítulos, tanto los de la introducción, como los del final, quedando recortados por la pantalla.