Ja, ja, ja... Qué película más peculiar. No entiendo porqué es tan desconocida. El argumento es muy divertido y las situaciones en que se ve el pobre Gregory aun más. Muy buena la frase de "...que caro es ser millonario...". La verdad es que la película es una crítica en toda regla a la alta sociedad de la época, la hipocresía y las falsas apariencias. A mi juicio, película muy recomendable, que tiene su moraleja final: el dinero no da la felicidad (al menos toda) ya que hay cosas que el dinero no puede comprar... Para los que piensen que el dinero lo compra todo, esta película les servirá como el ejemplo de la excepción que confirma la regla. Y para los que piensan que hay cosas que no tienen precio, se reirán y se compadecerán del personaje a lo largo de la película.

Muy graciosa, si señor. Agradable sorpresa descubrir esta película.