Excelente película y excelente interpretación de el genial Bill Murray inmerso ahora en papeles dramáticos dando un giro a su carrera cinematográfica. Es increíble como con una sola mirada, un solo gesto puede transmitirnos cosas tan diferentes...

La historia en sí es sencilla, pero maravillosamente sencilla. Nos encontramos ante un soltero empedernido que en su madurez hace un repaso por sus fracasos sentimentales ante una sospechosa carta de color rosa que recibe donde se le notifica que próximamente recibirá la visita de un hijo del cuál hasta ahora desconocía su existencia.

A través de las ex novias vemos la decadencia de ciertos valores y la crisis de determinadas ideas.

Estupenda banda sonora, tanto su tema central como las canciones africanas.

Estupendo final abierto...un final no-final, la historia sigue en algún lugar...la desazón le acompañará siempre.