En un primer momento puede parecer que Misterioso asesinato en Manhattan es una comedia divertida pero menor de Woody Allen. No habla de temas tan profundos como Maridos y mujeres o Hannah y sus hermanas. Es solo un divertimento. Pero es un divertimento que alcanza momentos gloriosos, que la sitúan a la altura de las mejores comedias, aunque al principio podamos pensar que, esta vez, Woody Allen se ha relajado.
Misterioso asesinato en Manhattan cuenta la descacharrante historia de un matrimonio, en el que él es... el Woody Allen de siempre y ella una mujer inteligente pero profundamente curiosa. Una noche conocen a sus vecinos, un entrañable matrimonio de ancianos. Pero antes de poder volver a encontrarse la vecina fallece en circunstancias cuando menos dudosas para la entrometida mujer. Y ahí comienza una investigación llena de conjeturas disparatadas (o no) y situaciones repletas de un contagioso sentido del humor.
Woody Allen completa un guión donde mezcla algunas de sus temas de siempre, con el misterio e incluso la tensión y el peligro pero mostrándose seguramente más divertido que nunca. Los diálogos vuelven a ser prodigiosos con alguna frase para la posteridad, y la complicidad entre los actores alcanza momentos de una deliciosa brillantez. Woody Allen repitiendo su personaje de siempre esta mejor que nunca. Y Diane Keaton vuelve a demostrar que en comedia es una actriz que no tiene rival. Entre ambos la química sigue intacta. Junto a ellos Alan Alda, en un personaje estupendo, y Anjelica Huston redondean un reparto excelente. Para los amantes del humor, para los amantes de la risa, para los amantes del cine inteligente, para los amantes de Woody Allen, para los amantes del cine en general Misterioso asesinato en Manhattan es su película