342/12(29/10/09) Interesante a la vez que irregular y fallida sátira sobre la guerra, dotada de una puesta en escena maravillosa que denota una pretenciosidad sin límites, toma como pretexto a la pomposa Brigada de caballería de húsares británicos, en el escenario bélico de la guerra de Crimea en 1.850, en la que se enfrentaron el Imperio zarista ruso contra la alianza franco-británica. La cinta está partida en dos, una se desarrolla en Gran Bretaña durante el periodo de adiestramiento, en la que el centro de la historia es la amistad entre los capitanes Louis Edward Nolan (David Hemings) y Fitz Maxse (Ben Aris), Louis es un idealista proveniente de la India que es vejado por ello por el hombre que comanda la Brigada, el engreído y fatuo Lor Cardigan (Trevor Howard), esta parte resulta floja, aburre, le cuesta avanzar, me deja frío, se mueve por un triangulo amoroso que no posee fuerza alguna, para llegar a la segunda parte, en la que llega la Guerra de Crimea, adornado este tramo con gloriosos carteles animados que nos describen de forma metafórica la contienda, es aquí donde la sátira alcanza cotas burlescas aparatosas mostrándonos los dos mundos de un ejército, los que luchan y los petulantes mandos que se mueven por el campo de batalla como si en un camping estuviese, sin importarle lo más mínimo la suerte de los soldados, está parte es la que posee la fuerza, es donde el mensaje llega diáfano, aunque le encuentro que el director no sabe tomarle el pulso al relato, tropieza sin saber si es una cinta histórica, una sátira, un alegato antibélico, se queda en el camino y esto hace que ni conmueva ni haga gracia. Recomendable a los incondicionales del género bélico-histórico. Fuerza y honor!!!