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España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
7
Drama. Romance. Documental Una mezcla de ficción y documental que retrata a los berlineses de 1930 durante un domingo. Obtuvo muy buenas críticas y dio la oportunidad a sus creadores (Siodmak, Ulmer, Wilder, Zinnemann) de dar el salto al cine de ficción. (FILMAFFINITY)
9 de marzo de 2024
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60/29(28/02/24) Grácil film silente germano, con un alto valor antropológico por como muestra con valor semi documental a la sociedad berlinesa (epítome de la alemana) durante las postrimerías de la República de Weimar, a poco tiempo de la llegada de Hitler al poder. Lo he visto por los nombres implicados en su producción, dirigida por los debutantes Robert Siodmak, y Edgar G. Ulmer, el primero responsable de títulos en USA como “La escalera de caracol”, “Forajidos”, “El abrazo de la muerte” o “El Temible Burlón”, el segundo haría carrera en series b en USA con títulos como “Satanás” o “El Desvio”, pero también aportaron a la dirección los no acreditados Curt Siodmak (hermano de Robert) se quedó en guionista acreditado en films de terror como “El Hombre Lobo” o “Yo anduve con un zombi”, Fred Zinnemann, tuvo una gran carrera con obras como “Solo ante el peligro”, “De aquí a la eternidad”, “Un hombre para la eternidad”, “Chacal” o “Julia”, y Rochus Gliese, este no salió de Alemania, y fue el menos conocido de los implicados, sobre todo recordado fuera de su país por su trabajo como director artístico en el filme dirigido por F.W. Murnau “Amanecer”, y que le valió la nominación al Oscar al mejor director artístico. Todos ellos, menos Gliese, también guionistas, en esta labor se les une nada menos que el gran Billy Wilder (con solo 23 años), en el que fue su primer libreto en cine de los muchos homéricos que vendrían después para encumbrarlo como el mejor de la historia (“Ninotchka”, “Perdición”, “Días sin huella”, “El Gran Carnaval”, “Sunset Boulevard”, “La tentación vive arriba”, “Con faladas y a lo loco”, “Testigo de cargo”, “Un, dos tres”, o “En bandeja de plata” le avalan).
La película fue posible gracias a que Robert Siodmak recibió 5.000 marcos como regalo de un tío y su hermano Curt tenía una historia para una película que se podía hacer con poco esfuerzo. Wilder se encargó escribió el guión en servilletas de papel en el Café Romanisches de Berlín, mientras que Robert Siodmak y Edgar Ulmer dirigían, y Eugen Schüfftan se ocupaba de la fotografía, asistido por un no acreditado Fred Zinnemann. Se ha discutido quién realizó realmente el filme, según el testimonio de Wilder, todos hacían de todo, con poquísimo dinero y una sola cámara que tuvieron que pedir prestada, animados por cierto espíritu de amor al arte. Eugen Schüfftan inventó el proceso Schüfftan, técnica de efectos especiales que empleaba espejos para insertar actores en decorados en miniatura, de los primeros usos del proceso fue para “Metropolis” (1927), dirigida por Fritz Lang, técnica ampliamente utilizada durante la primera mitad del siglo XX hasta que fue suplantada por las técnicas de mate móvil y pantalla azul, también creó los f/x del famoso “Napoleón” (1927) de Abel Gance. Schüfftan ganó el Oscar por la cinematografía en b/n de “El buscavidas” (1961). Todo conforma un equipo de Jóvenes Sobradamente Preparados.

La película describe la vida de los jóvenes en la metrópoli de Berlín a finales de los años 20. Cuatro de los cinco actores principales estuvieron por primera vez frente a la cámara, solo Christl Ehlers ya había desempeñado un papel principal en la película de cuento de hadas “Frau Holle” un año antes. Personajes ficticios interpretados por personas que no eran actores usando sus nombres reales y profesiones: taxista, dependiente de una tienda de discos, vendedor de vinos, extra de cine y modelo. El elenco trabajó en sus trabajos habituales durante seis días y durante el verano de 1929 pasó algunos domingos, su único día libre, filmando esta historia sin trama de berlineses de clase trabajadora haciendo un picnic en un parque ubicado en el campo berlinés. Teniendo gran valor la cinta por como refleja en modo realista-verite la vida en la capital alemana un domingo cualquiera de ocio, retrato festivo de las clases trabajadoras, con un enfoque de ligereza que cala por la alegría de vivir que transmiten, para atomizar esta impresión, hay un tramo en que los personajes están ausentes durante casi un carrete completo mientras la cámara viaja por la ciudad recogiendo momentos y rostros berlineses, emparentándola con la mencionada “Berlín: Sinfonía de una metrópolis”. Se puede entender se inspiró en el popular documental nibelungo "Berlín, sinfonía de una gran ciudad", pero poniendo una historia de por medio. Con la perspectiva del tiempo resulta con un halo melancolía por como Alemania, sin saberlo, estaba en ciernes de entrar en su época más oscura.

Vemos a jóvenes trabajando, planeando su jornada de asueto, discutiendo por niñerías a una pareja, se enfadan, como toman café, juegan a las cartas, almuerzan, se bañan en el lago, pasean por el mismo en barca de pedales (muy singular), charlan sobre cine. Ello emitiendo buen rollo, proyectando la vida ordinaria en este lugar y tiempo, postales cargadas de nostalgia

Film dividido en dos partes, el sábado y el domingo. Comienza un sábado en la estación del zoológico de Berlín. Se muestra el ajetreo y el bullicio de personas, coches, S-Bahn, autobuses y tranvías, una fase documental, un hombre disfruta con una gran estatua, unos niños juegan felices, un abuelo pasea a sus nietos, y de pronto, como si fuera casual, la cámara se queda con los que serán personajes principales: el taxista Erwin y su novia, la maniquí Annie; la extra Christl y su amiga Brigitte, una vendedora de discos;… (sigo en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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