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Voto de TOM REGAN:
7
2010
Adam Price (Creador), Mikkel Nørgaard ...
7,9
7.133
Serie de TV. Drama
Serie de TV (2010-2013). 3 temporadas. 30 episodios. Serie sobre política que narra el ascenso de la carismática Birgitte Nyborg al puesto de Primera Ministra de Dinamarca, y de la influencia del poder en su vida profesional y personal. Borgen es el nombre común con el que se conoce el castillo de Christiansborg, donde se encuentran los tres poderes del estado danés: el Parlamento, la oficina del Primer Ministro y la Corte Suprema. (FILMAFFINITY) [+]
23 de julio de 2016
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
118/02(04/07/16) Estimulante serie danesa creada por Adam Price con marcado acento realista-idealista, un drama político que huele a “El ala oeste”, tres temporadas de 10 capítulos cada una (2010-2011-2013). Borgen significa “castillo” en danés, se refiere al Palacio de Christiansborg, en Copenhague (sus habitantes lo conocen por ese sobrenombre), donde está el gobierno Dinamarca, la oficina del primer ministro, el parlamento y la corte suprema de justicia. La serie entrecruza con equilibrio, sobre todo en su primera temporada, varios niveles, la política y su convivencia necesaria y difícil con los medios de comunicación, Katrine Fønsmark, y cómo influye la vida íntima-familiar en cada uno de los personajes. Es de agradecer el modo elegante y sugestivo con que arranca cada episodio, con una cita sobreimpresionada referente a la política, habiendo entre otros frases de Chruchill, Maquiavelo, Sun-Tzu, Lincoln, Kierkegaard, Buda, Jefferson, y más. Stephen King la nombró como la mejor televisión vista 2012.
El escenario principal es Copenhague, la capital danesa, la protagonista es Birgitte Nyborg (Sidse Babett Knudsen), líder del partido moderado, que contra todo pronóstico y tras un pacto post-electoral en la primera mujer primer ministro de Dinamarca. En las dos primeras temporadas asistiremos a cómo afronta todos los problemas de su cargo, los de ídole interior, como los del exterior, ello debe intentar compaginarlo con su vida familiar. En la tercera temporada empezará desde abajo para intentar volver a “Borgen” como mandataria. Asimismo se irán entrecruzando con los sucesos políticos el cuarto poder, la prensa reflejada en una popular cadena de televisión, TV1 y un periódico sensacionalista, el Ekspres, dirigido por un ex político, Laugesen (Peter Migynd).
Es una serie con una factura técnica atractiva, elegante en su ambientación, con unos guiones trabajados para dar tridimensionalidad a su reparto coral y de temas poliédricos. Es en grado similar a la mencionada creación de Aaron Sorkin “The west wing”, presentándonos un gabinete de idealistas en ambos casos, capitaneados por un hombre (en este caso mujer) que intentará hacer las cosas bien, aunque por el camino se darán cuenta ambos del pragmatismo que hay que utilizar en muchos casos, asistiremos a sus dilemas, morales, a la complejidad que muchos casos acarrean, un mundo donde las cosas no son blancas o negras, ello además de entretejerlo con la vida familiar complicada y con los medios de comunicación que actúan como transmisor al pueblo, no siempre nítido, a veces manipulado por espúreas motivaciones. Asimismo las dos tienen como pilar de Pepito grillo a un asesor que actúa a la sombra del poder, en el caso de la serie americana era el jefe de gabinete Leo McGarry, en este caso es el asesor de comunicación Kasper Juul. En ambas se nos muestra la trastienda del poder, sus tejemanejes, los intereses que se cuecen en ella. La serie con rigor e inteligencia nos sumerge en debates éticos, exponiendo con neutralidad muchas situaciones, ejemplo, es ético utilizar información íntima sobre un oponente para hundirlo en tu favor? Está bien defender la sanidad pública y llevar a tus hijos un hospital privado? Es razonable que el esposo de la primera ministro trabaje en una empresa beneficiada por un contrato del gobierno? Menosprecian los daneses a los groenlandeses? Hay que legalizar la prostitución? Hay que ser más laxo sobre la entrada de inmigrantes? Hay que mantener las tropas en el territorio hostil de Afganistán? Está bien el trato que se da a los animales de granja antes de matarlos? Y más asuntos expuestos con ingenio y fluidez, entrelazados con la vida cotidiana con mucha naturalidad.
La serie muestra un arco de desarrollo en los personajes notorio, lo que hace empaticemos con la mayoría, con sus padecimientos, sus dudas, sus inseguridades, sus esperanzas e ilusiones, sus sacrificios personales, ello mientras propone reflexiones sobre nuestra sociedad, sobre nuestro mundo, sobre temas polémicos (la prostitución, la pedofilia, la inmigración, la depresión en la adolescencia...), una mirada un tanto tangencial, pues es desde un pequeño país, muy avanzado y rico percapitamente, pero realmente con poco peso en el mundo, al contrario que la serie susodicha de “El ala oeste”, aquí el presidente es el “Emperador” del mundo, si tose nos refriamos todos. Tiene el valor de no caricaturizar a los oponentes de la protagonista, los humaniza, los otorga carácter y alma, incluso al que se supone al “ogro” Svend Åge Saltum del partido de la ultraderecha, al principio puede parecer acartonado por su imagen cuasi-grotesca, pero a medida que lo conocemos se atisba un hombre con fuertes principios y una personalidad arrolladora. Una serie que en el devenir de los capítulos serpenteara por diferentes géneros, por el drama, el romance, el thriller, y todo salpicado de dosis desengrasante de humor.
La primera temporada resulta la más redonda y sólida en enfocamiento de temas peliagudos, en retratar los entresijos entre el poder y la vida doméstica. La segunda temporada decide ir un por más allá tratando temas de índole internacional, como el conflicto de Afganistán con tropas danesas sobre el terreno, o un ficticio arbitrio de Dinamarca en una guerra latente en un país ficticio africano, quedando bastante artificioso en su buenismo reinante en estos complejos temas, resolviendo problemas grandes de modo simplista. La tercera temporada da un giro completo, coloca a la protagonista desde el subsuelo para tener que volver a empezar de menos cero, creando un partido nuevo, y como deberá medrar con unos y con otros para tener oportunidad de asomar la cabeza, esta temporada tiene el defecto de que el personaje de Kasper Juul queda “capado” de contenido, un cuasi-figurante que parece pasar por allí a recoger la nómina,... (continua en spoiler sin)
El escenario principal es Copenhague, la capital danesa, la protagonista es Birgitte Nyborg (Sidse Babett Knudsen), líder del partido moderado, que contra todo pronóstico y tras un pacto post-electoral en la primera mujer primer ministro de Dinamarca. En las dos primeras temporadas asistiremos a cómo afronta todos los problemas de su cargo, los de ídole interior, como los del exterior, ello debe intentar compaginarlo con su vida familiar. En la tercera temporada empezará desde abajo para intentar volver a “Borgen” como mandataria. Asimismo se irán entrecruzando con los sucesos políticos el cuarto poder, la prensa reflejada en una popular cadena de televisión, TV1 y un periódico sensacionalista, el Ekspres, dirigido por un ex político, Laugesen (Peter Migynd).
Es una serie con una factura técnica atractiva, elegante en su ambientación, con unos guiones trabajados para dar tridimensionalidad a su reparto coral y de temas poliédricos. Es en grado similar a la mencionada creación de Aaron Sorkin “The west wing”, presentándonos un gabinete de idealistas en ambos casos, capitaneados por un hombre (en este caso mujer) que intentará hacer las cosas bien, aunque por el camino se darán cuenta ambos del pragmatismo que hay que utilizar en muchos casos, asistiremos a sus dilemas, morales, a la complejidad que muchos casos acarrean, un mundo donde las cosas no son blancas o negras, ello además de entretejerlo con la vida familiar complicada y con los medios de comunicación que actúan como transmisor al pueblo, no siempre nítido, a veces manipulado por espúreas motivaciones. Asimismo las dos tienen como pilar de Pepito grillo a un asesor que actúa a la sombra del poder, en el caso de la serie americana era el jefe de gabinete Leo McGarry, en este caso es el asesor de comunicación Kasper Juul. En ambas se nos muestra la trastienda del poder, sus tejemanejes, los intereses que se cuecen en ella. La serie con rigor e inteligencia nos sumerge en debates éticos, exponiendo con neutralidad muchas situaciones, ejemplo, es ético utilizar información íntima sobre un oponente para hundirlo en tu favor? Está bien defender la sanidad pública y llevar a tus hijos un hospital privado? Es razonable que el esposo de la primera ministro trabaje en una empresa beneficiada por un contrato del gobierno? Menosprecian los daneses a los groenlandeses? Hay que legalizar la prostitución? Hay que ser más laxo sobre la entrada de inmigrantes? Hay que mantener las tropas en el territorio hostil de Afganistán? Está bien el trato que se da a los animales de granja antes de matarlos? Y más asuntos expuestos con ingenio y fluidez, entrelazados con la vida cotidiana con mucha naturalidad.
La serie muestra un arco de desarrollo en los personajes notorio, lo que hace empaticemos con la mayoría, con sus padecimientos, sus dudas, sus inseguridades, sus esperanzas e ilusiones, sus sacrificios personales, ello mientras propone reflexiones sobre nuestra sociedad, sobre nuestro mundo, sobre temas polémicos (la prostitución, la pedofilia, la inmigración, la depresión en la adolescencia...), una mirada un tanto tangencial, pues es desde un pequeño país, muy avanzado y rico percapitamente, pero realmente con poco peso en el mundo, al contrario que la serie susodicha de “El ala oeste”, aquí el presidente es el “Emperador” del mundo, si tose nos refriamos todos. Tiene el valor de no caricaturizar a los oponentes de la protagonista, los humaniza, los otorga carácter y alma, incluso al que se supone al “ogro” Svend Åge Saltum del partido de la ultraderecha, al principio puede parecer acartonado por su imagen cuasi-grotesca, pero a medida que lo conocemos se atisba un hombre con fuertes principios y una personalidad arrolladora. Una serie que en el devenir de los capítulos serpenteara por diferentes géneros, por el drama, el romance, el thriller, y todo salpicado de dosis desengrasante de humor.
La primera temporada resulta la más redonda y sólida en enfocamiento de temas peliagudos, en retratar los entresijos entre el poder y la vida doméstica. La segunda temporada decide ir un por más allá tratando temas de índole internacional, como el conflicto de Afganistán con tropas danesas sobre el terreno, o un ficticio arbitrio de Dinamarca en una guerra latente en un país ficticio africano, quedando bastante artificioso en su buenismo reinante en estos complejos temas, resolviendo problemas grandes de modo simplista. La tercera temporada da un giro completo, coloca a la protagonista desde el subsuelo para tener que volver a empezar de menos cero, creando un partido nuevo, y como deberá medrar con unos y con otros para tener oportunidad de asomar la cabeza, esta temporada tiene el defecto de que el personaje de Kasper Juul queda “capado” de contenido, un cuasi-figurante que parece pasar por allí a recoger la nómina,... (continua en spoiler sin)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
... con lo excelente que había sido en las dos primera sesiones. En contra partida se le da más metraje a la cadena TV1, y sobre todo a un personaje hasta entonces bastante gris como Torben Friis, el jefe de informativos al que le ponen un jefe demasiado interesado en las audiencias, y poco en la profesionalidad y rigor periodístico, vamos que quería hacer de la cadena una Telecinco cualquiera, esta batalla se entrelaza con una infidelidad con una de las subalternas con lo que pone su matrimonio contra las cuerdas, esta subtrama queda impostada e innecesaria, lastrando a la serie.
La tara es su decaimiento en la fuerza dramática a partir de la segunda temporada, acudiendo a lugares comunes, a soluciones superficiales que denotan empobrecimiento en los guiones, siempre tomando como baremo lo espléndidos que eran los de la primera, esto se acentúa en la tercera donde se acude a darle la vuelta para proponer el clásico tener que volver a ganar lo perdido pero lo hacen con guiones agradables, divertidos, pero faltos de garra para trascender, en su retrato de los medios de comunicación se queda un tanto a medias en lo que se refiere a la eterna lucha entre integridad y audiencia, quedándose en cliches.
Sidse Babett Knudsen borda con enorme carisma su rol de primer ministro que sufre de cómo su dedicación a la alta política le acarrea graves problemas en su vida particular, es una encantadora, madura y hermosa mujer que transmite valor, idealismo, astucia, fuerza, y a la vez deja entrever fragilidad, inseguridad y vulnerabilidad, emitiendo matices, defectos, muy buena como se apodera el personaje de la actriz. Philip Asbæk como Kasper Juul es probablemente el rol más atractivo de la serie, más aún que la propia Birgitte, un tipo áspero, con secretos, enigmático, mentiroso, simpático, ingenioso, sibilino, mujeriego, el mejor consejero posible para la primer ministro, un tipo que desborda magnetismo, transpirando tormento interior, grietas anímicas, maravillosamente encarnado por el actor, de hecho uno de los grandes fallos de la tercera temporada es casi extirparlo. Birgitte Hjort Sørensen como la periodista idealista Katrine Fønsmark, desborda un meritorio arco de desarrollo, de la ingenuidad a tener que hacer encaje de bolillos entre su ideología y el pragmatismo de la profesión, tiene una gran química con Asbæk que hace que su romance de las dos primeras temporadas emane dulzura y una gran empatía con el espectador, notable su interpretación. Mikael Birkkjær como el marido de Birgitte deja buenos momentos, siendo muy buena la interrelación amor-desamor con la primer ministro, haciendo natural sus choques. Benedikte Hansen da vida con gran vigor a la beligerante periodista Hanne Holm, la mentora de Katrine, llena la pantalla con su frescura y brillo, de hecho una de las taras de la serie es no explotar suficientemente esta relación. Søren Malling como el jefe de noticias de la TV1 Torben Friis queda un poco apagado, no es capaz de insuflar el brío y pasión que personaje detenta, cuando en la tercera temporada se le da más cancha no lo aprovecha, se desdibuja siempre con un rostro frío y asentimental. Ole Thestrup como Svend Åge Saltum, tipo que en sus apariciones deja marca por su poderío, su don de gentes, su carácter, su simpatía innata, la fuerza con que defiende sus convicciones (acertadas o no), el actor lo impregna de pasión, de alegría, de Alma, magnífico. En la última temporada aparece un actor que deja marca por su carisma y energía, es Lue Dittmann Støvelbæk como el economista Jonas Rvn, impresionante el modo en que transmite personalidad, arrollador su empatía. Hay muchos más, pero estos son los que me han sido más importantes.
Serie recomendable a los que gusten de buenas series políticas que entretejen un universo sugestivo. Fuerza y honor!!!
Para ver las citas en orden de la propia serie acudir a mi blog en: http://tomregan.blogspot.com/2016/07/borgen.html
La tara es su decaimiento en la fuerza dramática a partir de la segunda temporada, acudiendo a lugares comunes, a soluciones superficiales que denotan empobrecimiento en los guiones, siempre tomando como baremo lo espléndidos que eran los de la primera, esto se acentúa en la tercera donde se acude a darle la vuelta para proponer el clásico tener que volver a ganar lo perdido pero lo hacen con guiones agradables, divertidos, pero faltos de garra para trascender, en su retrato de los medios de comunicación se queda un tanto a medias en lo que se refiere a la eterna lucha entre integridad y audiencia, quedándose en cliches.
Sidse Babett Knudsen borda con enorme carisma su rol de primer ministro que sufre de cómo su dedicación a la alta política le acarrea graves problemas en su vida particular, es una encantadora, madura y hermosa mujer que transmite valor, idealismo, astucia, fuerza, y a la vez deja entrever fragilidad, inseguridad y vulnerabilidad, emitiendo matices, defectos, muy buena como se apodera el personaje de la actriz. Philip Asbæk como Kasper Juul es probablemente el rol más atractivo de la serie, más aún que la propia Birgitte, un tipo áspero, con secretos, enigmático, mentiroso, simpático, ingenioso, sibilino, mujeriego, el mejor consejero posible para la primer ministro, un tipo que desborda magnetismo, transpirando tormento interior, grietas anímicas, maravillosamente encarnado por el actor, de hecho uno de los grandes fallos de la tercera temporada es casi extirparlo. Birgitte Hjort Sørensen como la periodista idealista Katrine Fønsmark, desborda un meritorio arco de desarrollo, de la ingenuidad a tener que hacer encaje de bolillos entre su ideología y el pragmatismo de la profesión, tiene una gran química con Asbæk que hace que su romance de las dos primeras temporadas emane dulzura y una gran empatía con el espectador, notable su interpretación. Mikael Birkkjær como el marido de Birgitte deja buenos momentos, siendo muy buena la interrelación amor-desamor con la primer ministro, haciendo natural sus choques. Benedikte Hansen da vida con gran vigor a la beligerante periodista Hanne Holm, la mentora de Katrine, llena la pantalla con su frescura y brillo, de hecho una de las taras de la serie es no explotar suficientemente esta relación. Søren Malling como el jefe de noticias de la TV1 Torben Friis queda un poco apagado, no es capaz de insuflar el brío y pasión que personaje detenta, cuando en la tercera temporada se le da más cancha no lo aprovecha, se desdibuja siempre con un rostro frío y asentimental. Ole Thestrup como Svend Åge Saltum, tipo que en sus apariciones deja marca por su poderío, su don de gentes, su carácter, su simpatía innata, la fuerza con que defiende sus convicciones (acertadas o no), el actor lo impregna de pasión, de alegría, de Alma, magnífico. En la última temporada aparece un actor que deja marca por su carisma y energía, es Lue Dittmann Støvelbæk como el economista Jonas Rvn, impresionante el modo en que transmite personalidad, arrollador su empatía. Hay muchos más, pero estos son los que me han sido más importantes.
Serie recomendable a los que gusten de buenas series políticas que entretejen un universo sugestivo. Fuerza y honor!!!
Para ver las citas en orden de la propia serie acudir a mi blog en: http://tomregan.blogspot.com/2016/07/borgen.html