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España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
8
Romance. Aventuras. Drama Libremente inspirada en la obra homónima de la escritora danesa Isak Dinesen. A principios del siglo XX, Karen (Streep) contrae un matrimonio de conveniencia con el barón Blixen (Brandauer), un mujeriego empedernido. Ambos se establecen en Kenia con el propósito de explotar una plantación de café. En Karen Blixen nace un apasionado amor por la tierra y por las gentes de Kenia. Pero también se enamora pérdidamente de Denys Finch-Hatton ... [+]
28 de marzo de 2016
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
38/01(01/03/16) Notable film de Sydney Pollack que combina con equilibrio el melodrama romántico intimista con el aroma a evocador a cine de aventuras, gracias a una puesta en escena prodigiosa donde se combinan unos bellísimos escenarios africanos, atomizados por la extraordinaria fotografía de David Watkin, envuelta en la sublime música de John Barry, aderezado por un hábil guión de Kurt Luedtke (“Caprichos del destino”), y esto con una pareja con una química profunda. Historia que se basa libremente se basa libremente en el libro autobiográfico “Memorias de África” escrito por Isak Dinesen (seudónimo Karen Blixen ), publicado en 1937, con material adicional del libro de Dinesen “Sombras en la hierba”, de “Isak Dinesen: The Life of a Story Teller”, de una biografía de Denys Finch Hatton escrita por Errol Tzebinski, y de la biografía de Judith Thurman “Isak Dinesen”, con añadidos del propio guionista al estilo de escritura lírica de Karen Blixen, cuenta una serie de seis episodios enlazados de la vida de Karen, intercalados con su narración, ello durante su estancia en Kenia de 1914 a 1931, mientras el territorio era una colonia de la corona de Inglaterra. Gran éxito de público y crítica, ganando 7 Oscars, película, guión adaptado, dirección, dirección artística, fotografía, sonido, música, y otras cuatro nominaciones sin premio, actriz (Meryl Streep), secundario (Klaus Maria Brandauer), vestuario y montaje. Pollack dijo sobre de lo que iba la cinta "El tema de la película es el de la libertad contra la posesión".

Relato de un romanticismo épico, revestido con indudable aroma a clásico imperecedero, con ritmo sereno y de momentos contemplativos, quizás influenciado por la visión de Karen en su autobiografía <... a los nativos no les gusta la velocidad, ya que no les gusta el ruido ...". Recorrido por el edén de la África colonial, parajes formidables que destilan aventura, visualmente y musicalmente portentosa, esto no resulta artificioso pues sirve para como Karen nos vayamos enamorando de estos bellos lares, y todo engarzado a una romance en que al espectador se le trata de adulto, sin sensiblerías, ni maniqueísmos torticeros, te emociona, cala, contada con elegancia prodigiosa, se tratan con hondura temas como la soledad, la necesidad de dejar de estarlo, el amor verdadero, el espíritu aventurero, los matrimonios de conveniencia, el vivir sin ataduras, la muerte, las ansias de libertad, contrapuesto esto a la ansias del amor en tener la posesión del otro, el amor como sentimiento paradójico, lo das todo en señal de sumisión, pero a la vez esperas todo de el otro, en señal egoísta. Llama la atención el retrato adelantado a su tiempo de una mujer, un gran alegato vitalista a favor de la mujer libre, de sus ansias de vivir, de ser autosuficiente, de no ser mero florero, como le dice Karen a Bror después de su odisea para llevarles víveres al ejército <Ha sido divertido>, como es la que echa al marido de casa, la que domina las situaciones, maravillosa. Asimismo es un fresco un tanto idealizado del colonialismo en África, apenas se incide en los problemas de los colonizados, si acaso vemos como Karen intenta occidentalizarlos enseñándoles su cultura con una escuela.

El guión construye a personajes de gran solidez, delineados de modo muy humano, con sus defectos, imperfecciones y matices, enlaza de modo virtuoso los diferentes momentos, lo hace goteando el relato de grandes secuencias, con diálogos brillantes, y sabiéndolo conjugar con expresividad gestual de miradas, roces, lavados de cabello, sonrisas, silencios intensos, excelentes recursos. Todo mezclando los toques intimistas con la aventura, lo épico con lo introspectivo.

Meryl Streep le da a su rol un carácter fuerte, racial, vigoroso, vitalista, valiente, aventurero, sabe emitir erotismo, romanticismo, y toda una gama de emociones torrencial, se mimetiza de modo grandioso con el personaje lo hace suyo. Robert Redford otorga a su Denys un halo de aventura, de espíritu libre, de simpatía, de arrojo, de romanticismo, de empatía, con esa pose de héroe salvador, de maduro apuesto, de sonrisa encantadora, si yo que soy muy hetero..., y entre el actor y Streep una compenetración mítica, Redford trabajó en siete films con el director. Klaus Maria Brandauer en gran encarnación del Barón Bror, le aporta carisma, temple, flema, y mucha entereza, era la única opción para el rol de Pollack.

Puesta en escena antológica, rodándose en África en los escenarios naturales que sucedieron los hechos narrados, en el Shaba National Game Reserve en Kenia, con un sobresaliente diseño de producción de Stephen B. Grimes (“La hija de Ryan”), en las colinas Ngong, con figurantes de descendientes de los Kikuyu, la casa de Karen en que se rueda no es la real, esta es ahora el “Museo Karen Blixen”, es la casa Mbagathi, cerca del museo, una lechería actualmente, y en casa Scott, reformada para el rodaje, la casa del Gobierno Colonial británico fue la Escuela de Nairobi, el tramo inicial en Dinamarca es en realidad en Surrey (Inglaterra). Esto enaltecido por la sibarita fotografía de David Watkin (“Carros de fuego”), componiendo cuadros de una belleza descomunal, lienzos formidables, de un cromatismo fulgurante resaltando los paisajes africanos, jugando con épico con los claroscuros, el crepúsculo de los amaneceres, con expresivos primeros planos, siendo Magno el tramo del paseo en avioneta, y se le suma la Colosal música de John Barry (la mítica melodía de James Bond), estremecedora melodía que se te hunde melancólicamente en el subconsciente para siempre, una de las partituras que entra por derecho propio en el Olimpo de las mejores de la historia del Cine.

Momentos recordables: El evocador inicio con la narración en off de Karen recordando a Denys en África, con imágenes que lo dibujan cual silueta sobre el horizonte de la sabana, cual espíritu libre “Yo tenía una granja en África, a los pies de las colinas de Ngog",... (sigue en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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