Haz click aquí para copiar la URL
España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
5
Comedia. Drama. Bélico M.A.S.H. narra las aventuras de dos cirujanos del ejército destinados a una unidad móvil médica en Corea durante la guerra. Tanto ellos como su equipo de enfermeras se toman el trabajo muy en serio pero, en su tiempo libre, las bromas constantes y la ironía hacen más llevadera la situación. (FILMAFFINITY)
21 de enero de 2020
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
12/12(18/01/20) Este 25 de enero se cumplen medio siglo del estreno de este popular film, desgraciadamente el tiempo no ha pasado en balde, ha arrugado esta pretendida comedia negra que satiriza la guerra de modo fachoso. El director Robert Altman adapta un guión de Ring Lardner Jr. (“La mujer del año”), que a su vez adapta la novela “MASH: Una novela sobre tres doctores del ejército de Richard Hooker”, centrado en una unidad de personal médico estacionado en un Hospital Quirúrgico del Ejército Móvil (MASH) durante la Guerra de Corea, teniendo protagonismo un reparto coral (gran parte de la filmografía ‘altmantian’ ser así) como Donald Sutherland, Tom Skerritt y Elliott Gould, con Sally Kellerman, Robert Duvall, René Auberjonois, Gary Burghoff, Roger Bowen, Michael Murphy, y en su debut cinematográfico, el jugador profesional de fútbol Fred Williamson. El escenario de la Guerra de Corea se quería ver como Vietnam, entonces en pleno apogeo en USA. La cinta es sucesión continua de gags se alargan en episodios e inconexos, con la pretendida idea de reflejar que en las peores situaciones el ser humano intenta vivir con humor, pero esto en la forma que discurre me es sin gancho alguno. Los momentos de humor avanzan a machetazos de sal gorda, machistas, homofobia, anticlericalismo, discurren sin gracia, con personajes que se comportan como payasos y lo peor es que no hacen gracia. No hay narrativa coherente, si se quiere exponer la crudeza de la guerra me queda esto como algo lejano por la forma de entrelazarlo la historia, aquí no hay emoción alguna, todo me es más frío que el iceberg que chocó con el Titanic, me da igual lo que les pase a estos seres guiñolescos nada creíbles, todo me resulta inconsistente, meras viñetas aparatosas, no entiendo lo que vio la gente a este producto sin chispa, su crítica a la guerra me queda muy al margen, muy de fondo. No hay sensación de dramatismo, no hay conexión con ningún herido, son meras figuras sin carácter , no hay reflexión sobre el belicismo, no se comenta esto, no hay presente el caos de la contienda con llegadas de heridos, simplemente están ahí estos, se les atiende y jugar a hacer el idiota toca, todo es ligero y trivial.

La aclamación en su día fue tremenda, no sé si por el contexto social del momento: La película ganó el Gran Premio del Festival Internacional de Cine, más tarde llamado Palme d'Or, en el Festival de Cine de Cannes de 1970. La película recibió cinco nominaciones a los Premios de la Academia, incluida la Mejor Película, y ganó el Premio al Mejor Guión Adaptado; Pero es que décadas después la siguen loando (¿?): MASH fue considerado "culturalmente significativo" por la Biblioteca del Congreso y fue seleccionada para su conservación en el Registro Nacional de Cine de los Estados Unidos. The Academy Film Archive conservó MASH en 2000. La película inspiró la serie de televisión “M * A * S * H”, que se desarrolló entre 1972 y 1983. En 1998 fue elegida por el 'American Film Institute' como una de las 100 mejores películas de la historia (en el puesto 54).

Los créditos iniciales hacen augurar el dramatismo de la guerra, ello cuando vemos helicópteros transportar heridos, esto adornado por la icónica música que estuvo durante años surcando nuestras pequeñas pantallas en la mítica serie derivada de la película, aunque en este caso con letra “Suicide Is Painless", con música de Mandel y letra de Mike Altman, el hijo del director de 14 años.. Pero una vez empieza todo es un devenir de sub tramas episódicas, pasando por lo racista, lo machista, lo misógino, el bulyng, la humillación, la homofobia, la loa del adulterio, para tener un clímax ridículo y fuera de lugar en un partido de rugby. Todo esto enarbolado por unos ‘héroes’ con una mentalidad propia de quinceañeros con acné, con picores sexuales, que se lo pasan pipa jugando al golf, bebiendo martinis, ridiculizando el suicidio, utilizando a las mujeres como objetos, donde nunca vemos un mínimo sufrimiento por lo que sucede a su alrededor nada les afecta. Se hace una alabanza de la rebeldía frente a la rigidez marcial, ello con situaciones de brocha gorda esquemática, propia de viñetas fachosas.

Johnny Mandel compuso música incidental utilizada a lo largo de la película. En la banda sonora también se escuchan interpretaciones vocales japonesas de canciones como "Tokyo Shoe Shine Boy", "My Blue Heaven", "Happy Days Are Here Again", "Chattanooga ChooChoo" y "Hi-Lili, Hi-Lo"; actuaciones improvisadas de "Onward, Christian Soldiers", "When the Lights Go On Again" y "Hail to the Chief " de los miembros del reparto; y el instrumental "Washington Post March" durante el climax del partido.

Llama la atención el mantra anti-cristiano que emana de la película en múltiples ocasiones, ello en un claro tiente izquierdista (como todo el film: Haciendo del capellán del campamento, Patrick 'Dago Red' Mulcahy (Rene Auberjonois), un tipo que no se entera de nada, un inocentón buenista idiota; Como los protagonistas se rien de la religiosidad de Burns (Robert Duval), haciendo burlas de sus rezos, haciendo chanzas de su ardua fe, no siendo esto suficiente el guión lo coloca como a alguien hipócrita cuando se acuesta con la Maj. Margaret O'Houlihan (Sally Kellerman); Otro insulto al cristianismo es cuando se celebra la supuesta “Última cena” de Capt. Waldowski (John Schuck), que quiere suicidarse por creerse homosexual (¿?), y entonces la cámara compone el cuadro de Da Vinci (valga la redundancia) “La última cena” en una tienda de campaña, por cierto esto no es nada original, pues ya lo hizo Buñuel en “Viridiana” (1961) , pero esto además enmarcado en una hedionda parodia d ela resurrección de Jesucristo por mor del sexo, este conseguido de un modo muy realista, la amante de Hawkeye, 'Dish' (Jo Ann Plfug), es empujada por este a fornicar con el ‘muerto’, para revivirlo en un éxtasis pagano; Todo lo dicho con el nivel de gracia del teta, caca, culo, pedo, y al parecer hubo quien se rio.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow