Terminando de ver “Nocturnal Animals” (2016) de Tom Ford con Amy Adams, Jake Gyllenhaal, Armie Hammer, Aaron Taylor-Johnson, Michael Shannon, Isla Fisher, Kristin Bauer van Straten, Karl Glusman, Laura Linney, entre otros. Drama de suspense y misterio, sobre una mujer que a través de una novela escrita por su ex esposo, redescubre su pasado. Tom Ford vuelve a filmar un comercial de moda demasiado cuidado, aséptico, y luminoso, con un preciosismo visual que pareciera continuar desde “A Single Man” (2009), con sus encuadres y tomas de atardeceres, el sol, el agua, las casas con grandes ventanales, los anteojos de pasta gruesa, homoerotismo, la banda sonora “herrmanniana”, y el estilo de dirigir “a lo Hitchcock” La historia tiene demasiadas lagunas argumentales, que solo se aclaran tras una discusión post visionado, no durante la proyección, incluido el final, por lo que quedan cuestiones de fondo como: ¿Qué pasó realmente? ¿Qué pasó con Hutton y su amante? ¿Qué pasó con el 3° asaltante/delincuente, Turk? ¿Qué relación tiene “la mujer del celular con el bebé”? ¿El cameo de Michael Sheen? No está claro lo que Ford intenta decir exactamente, y eso es lo más frustrante. Sin embargo, como director maneja muy bien el suspenso y el “thriller”, pero el guión, y muy probablemente el libro en que se basa, “Tony and Susan” de Austin Wright, es quien le cobra factura.
NO RECOMENDADA.
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas.
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