Terminando de ver “Pasqualino Settebellezze” (1975) de Lina Wertmüller con Giancarlo Giannini, Fernando Rey, Shirley Stoler, Elena Fiore, Piero Di lorio, Enzo Vitale, Roberto Herlitzka, entre otros. Drama italiano sobre un “playboy” irónicamente apodado “Settebellezze” o “Siete Bellezas”, por la fealdad de sus hermanas, y sus correrías contadas mediante “flashbacks”, al ser prisionero en un Campo de Concentración durante La Segunda Guerra Mundial. La película tiene la curiosidad, de haber sido la primera película en que una mujer es nominada al Premio de La Academia en la categoría de Mejor Dirección, una hazaña que no coincidió de nuevo hasta 1993, cuando la cineasta neozelandesa, Jane Campion, fue nominada por “The Piano”, a las que siguieron Sofia Coppola por “Lost in Translation” (2003) y Kathryn Bigelow por “The Hurt Locker” (2008), que es la única de las 4 que ha ganado el premio; así como por haber recibido nominaciones al Oscar como: Mejor película extranjera, actor (Giancarlo Giannini), y guión original. La película brilla desde lo técnico, la cámara de Wertmüller logra capturar y mostrar los eventos serios de La Segunda Guerra Mundial, empezando por ese montaje inicial, a modo documental, que nos pone en la situación política y marco histórico donde se desarrolla la trama; no así la parte de comedia, ahí se pierde el ritmo estrepitosamente, se hace absurdo y aburrido, con al menos 3 largas escenas musicales donde solo se aprecian primerísimos planos, excesivos, no me sorprendería que Lina sintiese atracción por Giannini en este 4° filme juntos; así como se hace demasiado larga, con puntos muertos, que si se hubiera cortado toda la parte cómica, hubiéramos tenido una gran película sobre El Holocausto, muy en línea a “La Vita È Bella” (1997); del resto del reparto, atención a Shirley Stoler como La Comandante del Campo, cada encuadre de ella da miedo… en una muy buena personificación; y Fernando Rey está muy desaprovechado. Lastra la propuesta, el tratamiento misógino de la directora, tal vez en su interés de mostrar el trato de los hombres mediterráneos, para no solo incluir a los italianos, en el trato con las mujeres; también se percibe cierta pederastia del protagonista, al ir tras un mujer muy joven… así como la ambigüedad en el trato con sus hermanas: ¿Incesto? "Oh yeah. Oh yeah. Oh yeah. Oh yeah"
NO RECOMENDADA
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas.
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