Pocas veces me agrada Nicolas Cage como actor y, sin embargo, pese a que le han asignado un papel que nada tiene que ver con su faceta real (no aprendió de que le tocara la lotería y ha acabado arruinado), aquí no me disgusta porque transmite buenos sentimientos. De vez en cuando hace algo decente, como su Yuri Orlov de "El señor de la guerra", aunque tengan que pasar x películas para que podamos comprobarlo. Por su parte, estoy de acuerdo con aquellos que afirman que éste es el trabajo de Bridget Fonda en el que aparece más atractiva, porque simplemente está encantadora. Para finalizar tenemos a una irritante Rosie Pérez a la que le ha tocado un personaje odioso, ambicioso sin escrúpulos, pero en el que se puede identificar a gente que existe en la sociedad.
Dicho esto definiría esta película como una versión moderna del clásico "¡Qué bello es vivir!", con sus particularidades, claro está. Si en aquella Clarence ganaba sus alas, en ésta son Charlie e Ivonne las que lo hacen gracias a su forma de ser como personas y debido al milagro que se produce en sus vidas. Es de agradecer, además, que el director intente no forzar demasiado las situaciones (ver spoiler), lo cual es muy complicado en este tipo de argumentos.
Por último, maravillosa música presidida por el tema de Frank Sinatra "Young to heart",
Mi nota: 7,7