No he leído el libro, pero esta adaptación me parece muy lograda en cuanto a ambientación, recreación de la Edad Media y amenidad en el avance de la trama. Tal vez algunas escenas incluso parecen apresuradas; pero como no impiden la comprensión de lo que sucede, casi es de agradecer que vaya directamente al grano.
Al igual que en "Ágora", el mensaje de la película abarca esa presunta incompatibilidad entre la religión y el progreso cuando se investiga terrenos considerados heréticos. Da igual quiénes sean los fanáticos o su credo. Pretenden imponer sus normas, sin que los árboles les permitan ver el bosque.
Ben Kingsley, como siempre, fabuloso. El resto de los actores, bien, destacando el papel protagonista de Tom Payne.
Y para quien sea aprensivo como yo a estos temas médicos, tiene muy pocas escenas explícitas de este tipo. Merece la pena.
Mi nota: 8,2