Salvo "Gallipolli" no recuerdo ninguna película que aborde la invasión de Turquía por parte del ejército australiano en apoyo a los británicos en la I Guerra Mundial. Quizá por eso este drama bélico y épico de época sea tan interesante (lo de romántico sólo en el estricto sentido de la palabra según los movimientos del S. XIX, luego lo explico). Además, profundiza en el después para aquel gran imperio que fue el otomano y fascina con sus paisajes, fotografía y música.
Correcto debut de Russell Crowe como director, pese a los altibajos que tiene a lo largo del metraje y algún borrón en el guión (ver spoiler 1). Se rodea bien de actores turcos que dan credibilidad a una historia real y, sobre todo, de la bellísima Olga Kurylenko, con la que establece una relación que no es tan típica en las producciones actuales (ver spoiler 2).
El argumento, asimismo, lanza un mensaje sobre el comportamiento de los hombres en una guerra cruel y horrenda, y cómo esos mismos hombres pueden ayudarse y confraternizar una vez acabada la misma.
Mi nota: 6,7