Después de ver la película me pregunto si el pobre Lars, en tratamiento de su depresión, está siendo víctima de una terapia absurda como la que aplica Willem Dafoe a la Gainsbourg. Como sea así ¡ apañaos estamos !. Aunque, bien pensado, quizá descubramos a un director cómico la mar de solvente, tú, porque a mí Anticristo me ha provocado risa en sus 3/4 partes. La que se lía por no querer que la pobre mujer se tome sus pastillicas antidepresivas y ansiolíticas, y obligarla a una terapia new age! Delirios, paranoias y todo un sinfín de pensamientos patológicos resultado de una mente enferma, que necesita tiempo y cuidados para superar un duelo.
En fin, espero que Lars en breve nos obsequie con una película como las que hacía, y por favor que se deje de experimentos psicoanalíticos.