Buen duelo interpretativo entre Blanca Portillo y Maribel Verdú, bien arropadas por un excelente grupo de secundarios.

Una mujer joven y la novia de su padre intentan sacar adelante un negocio familiar, una sala de billar, que parece no tener ningún futuro. La joven, engañada y traicionada por su marido, tratará de salir adelante junto a una mujer sola y amargada tras la muerte de su pareja, ahogada por las deudas y la enfermedad de su madre.
Tanto el negocio como los problemas de las dos mujeres saldrán poco a poco a flote pero no sin dificultades.

Historia interesante con buenos momentos y correctas interpretaciones. He echado algo más de garra y emoción en algunos momentos, y algunos diálogos me han parecido un tanto forzados sobre todo las escenas entre Maribel Verdú y su marido prófugo.

Entre los secundarios me gustaría destacar a Raúl Arévalo y al actor que interpreta a "Antonio".

En su conjunto, una interesante propuesta y buen cine español.