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Voto de Kyrios:
7
Intriga. Drama. Cine negro Manny es un músico de jazz que vive apaciblemente en Nueva York con su esposa Rose y sus dos hijos pequeños. En una aseguradora, una empleada lo confunde con un ladrón que había robado allí unos días antes y lo denuncia a la policía. Comienza entonces para él una angustiosa pesadilla: es detenido y acusado de una serie de hurtos perpetrados en el barrio. Lo terrible es que todos los testigos y las pruebas caligráficas corroboran su ... [+]
8 de marzo de 2013
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cualquier biógrafo amante de la anécdota siempre empieza con la misma historia cuando sale a colación el tema del falso culpable en la filmografía de Hitchcock. Sí, ya lo saben. De pequeño Hithcock fue a la comisaría por encargo de su padre y entregándole una nota al comisario. La nota, escrita por su padre, pedía al comisario que castigara al muchacho encerrándole en la cárcel un par de horas. El caso es que nuestro joven director fue metido en la prisión sin saber porque y este hecho le traumatizó para toda la vida. No sabemos exactamente si Hitchcock se aprovechaba de esta anécdota para autopromocionarse o darle más importancia de la que realmente tenía, pero si es cierto que aprovechaba cualquier entrevista para soltar la historia.

Evidentemente, Falso culpable, es la película que más juega con este tema, como ya nos lo indica el mismo título de la obra. Hitchcock utilizaba este recurso argumental, porque quería comprometer al espectador, para que este se sintiera perfectamente identificado con el personaje principal y mientras este fuera injustamente acusado, el público sufriera y compartiera el mismo dolor del imputado. No en vano, Falso culpable es una de las películas de Hitchcock que más se sirve del plano subjetivo. Se sirve de él en casi todos los momentos de clímax en los que el personaje principal se siente atacado. La unión entre espectador y personaje ha de ser básica y fundamental.

También la enfermedad mental y los entresijos de la mente hacen su aparición en la película. En esta ocasión la tempestad cae sobre la mujer del personaje de Henry Fonda, que se verá avasallada por las acusaciones sobre su marido. La interpretación de Vera Miles es fundamental para que esto funcione. Hitchcock trabajo en largas sesiones con ella para llegar al desequilibrio emocional que buscaba el director inglés para la película. Y a fe que lo funciona, el personaje que encarna Vera Miles nos deja algunas de las secuencias más talentos de la trayectoria del director británico.

Hitchcock explora algunas interesantes formas, como el abuso de planos subjetivos ya citados. También hay un movimiento de cámara interesante (aunque a nuestros ojos actuales pueda parecer una nimiedad) como el balanceo de cámara que intenta transmitir el desasosiego que siente el personaje de Fonda una vez encarcelado o ese fundido que junta la cara del presunto culpable con el verdadero asesino, que funciona magníficamente (el parecido físico ayuda a crear el efecto buscado). Es una de las películas que más busca el verismo, y pese a sus recursos, se aleja de obras que juegan al desconcierto de manera mucho más abultada, normal si tenemos en cuenta que se trata de un argumento que intenta acercarse mucho más a la gente de la calle y alejarse del glamour que destilan otras películas suyas. Una demostración de ello es que el cameo típico que hacía en cada una de sus películas lo hace en un prólogo especial, en el que nos advierte que la historia que tenemos a continuación es real.

Es cierto que hay momentos irregulares que rompen con la tensión. Una vez fuera de la cárcel y en plena búsqueda de testigos la película decae en intensidad. Se intercalan historias (como la de Vera Miles, que pese a ser excelente por sí misma, no está bien enlazada). Le pesa un poco a la obra, y la deja en un segundo escalón respecto a sus obras maestras.

Otra vez Hitchcock vuelve a colaborar con Bernard Hermann. Para no variar, la unión entre los dos sigue siendo excelente. La composición, que repite una pequeña sintonía compuesta con pocas notas, consigue meterse en nuestra cabeza por su tono oscuro y decadente que revela.

http://neokunst.wordpress.com/2013/03/08/ciclo-hitchcock-falso-culpable/
Kyrios
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