¿De qué va?
Tras cinco años de separación, J, regresa de Alemania a España tras recibir una carta de C, su exmujer. Sus rencores, sus dolores y sus verdades, quedarán impresas en ese día en el que volverán a verse para hablar.

Actores.
Javier Cámara (Fuera de Carta) es J
Candela Peña (Princesas) es C

Impresiones.
El 16 Festival de Cine de Málaga abría sus puertas con Ayer No Termina Nunca, bajo petición de la propia Isabel Coixet, que quería participar. La directora de cintas tan buenas como Mi Vida Sin Mí o La Vida Secreta de Las Palabras, nos trae una cinta que bajo su aspecto de ser similar en temática, resulta muy diferente a la mayoría de sus trabajos.

Basado en la obra de teatro Antes te Gustaba la Lluvia de Lot Vekemans, Coixet la adapta libremente, implicando parte de la historia a una de las personas a las que va dedicada la cinta, una amiga que sufrió mucho, desde la pérdida de un hijo a ese agolpamiento general en referencia a la pérdida de trabajo por la profunda crisis de éste país. Y esos son algunos de los elementos que hemos vivido en Ayer No Termina Nunca. La cinta comienza en 2017, cuando Messi lleva ya 10 balones de oro, el fútbol club Barcelona paga millonadas por un jugador guineano, y España tiene un agujero tremendo, viviendo una crisis que dura desde años atrás A ello se le une la construcción de un enorme casino que destruirá una zona de arboleda, y que finalmente nos daremos cuenta que ni siquiera se realizará, si acaso había alguna esperanza de que se ampliara el cupo de empleo por la ocasión. Todo suena catastrofista y hasta cierto punto apocalíptico. Coixet no nos augura un buen futuro para 2017.

Es cierto, la cinta de Coixet aprovecha su argumento para hablar de asuntos políticos de hoy día y los usa como crítica a la sociedad en la que vivimos. No obstante, todo queda fuera de lugar ya que el discurso lo tenemos muy bien aprendido y mancha una historia que podría haberse mantenido al margen. Todo viene a raíz en la película por la pérdida del hijo que tenían en común J y C. Murió porque había recortes en sanidad. Estuvo cinco horas esperando y no lo atendieron. Todo eso, es a nuestro pesar, muy cierto hoy y triste, pero esa crítica, como he dicho, desplaza en demasía el contenido que fluye en la relación de los dos protagonistas. Isabel Coixet plasma esa obra de teatro en lo que realmente parece de cara al espectador, un monólogo continuo entre dos. Una obra que de seguro tendría mas éxito si se conservara en las tablas. La directora hace uso de imágenes en blanco y negro, donde los protagonistas están sentados en una caverna solitaria, en referencia a su mente. Es ahí al hablar cuando dicen lo que piensan. Esa mezcla curiosa dificulta a veces la sencillez con la que se intenta tratar el asunto. Sin embargo, la pareja de protagonistas ya maduros, a veces se comportan de forma infantil, sobretodo Candela Peña, quien tiene un lío en su cabeza del que no sabe como salir. Sus expresiones, momentos de burla y gracia que probablemente hagan reír al público, son demasiado exagerados, quedando así constancia de que es una obra expresamente para teatro.

Y como opinión personal, seré sincero, la apertura del festival de éste año no ha sido todo lo buena que se esperaba, por la película de Coixet. Hora y media de metraje se convierten en tres horas mentales de aturdimiento y aburrimiento, donde vemos y oímos a los protagonistas hablar de su vida, la cual no tiene interés ninguno para el espectador. No hay emociones salvo un par de momentos, solo se recula constantemente para decirse el uno al otro lo que no quiere oír, como si de una pareja de adolescentes se tratara.

Las actuaciones, son irregulares. Javier Cámara está muy comedido y quizás es el mas formal, pero Candela Peña destruye por completo a su personaje, pareciendo por momentos aburrida de sí misma y de lo que hace. Y con ello nos aburre a nosotros. Por otra parte está la banda sonora de Alfonso Villalonga la cual ha sido muy escasa. Solo suena al principio y un instante en una escena del tramo final. La directora quiso así darle mas fuerza a lo que hablaban sus protagonistas, y eso, ha sido una mala opción. No es ésta la Isabel Coixet que me esperaba, y probablemente lo mejor sea que vuelva a rodar en Inglés. La esperamos con Panda Eyes, con mayores expectativas, de seguro.

Lo Mejor: Algunos momentos de Javier Cámara.

Lo Peor: Su innecesario discurso y crítica política. Se hace eterna. La peor película de Coixet

Calificación: 1/10

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