La película no es que esté mal pero otra cosa muy distinta es que guste. La verdad que como ejemplo de lo bajo que te puede llevar el consumo de drogas "Diario de un rebelde" es de lo más pedagógica, pero más allá de reflejar lo dañino que son estas sustancias, no aporta gran cosa. Cierto que tiene momentos duros y que Leonardo DiCaprio está inmenso, cosa que debería hacer callar para siempre a aquellos que todavía dicen que es un mal actor, pero en ocasiones desvaría la trama, es plana, el guión es malo y el final, muy abrupto y flojo. Con todo lo dicho no pueda dejar pasar esa conversación en la que uno de la pandilla rechaza unas pastillas de anfetaminas que le ofrecen y otro le espeta "¿eres un anticuado de mierda?". Esto es bastante obvio, o sea, "lo moderno" es drogarse. Otra razón para ser reaccionario.

"Diario de un rebelde" se basa en la biografía de un tal Jim Caroll, escritor y músico que, por cierto, aparece en la película en un pequeño papel. Por este motivo parece a veces demasiado episódica. No obstante, se deja ver siempre y cuando tengas en cuenta que, por el tema, no es que sea precisamente agradable. Uno disfruta poco. Una de las pocas veces es cuando salen las gemelas Cynthia Daniel y Brittany Daniel, conocidas por la divertida serie de televisión "Las gemelas de Sweet Valley" (1994). Aquí, si bien son bastante golfas, están guapísimas las dos (¡como no!) y muy sexys, aunque siempre me ha gustado más Cinthya, seguro que porque hacía de buena. Gracias a aquellos buenos tiempos en los que veía la serie, aprendí a distinguirlas, cosa que casi 20 años más tarde, he comprobado que aún puedo hacer.