No es engaño, "Combustión" viene a ser la versión española de la saga "The Fast and the Furious", especialmente la primera del 2001, en plan pijo pero hecha con menos presupuesto. También se puede decir que es una versión a cuatro ruedas de "Tres metros sobre el cielo" (2010), pero la comparación no es tan clara como en la otra. Lo que creo es que el objetivo de Daniel Calparsoro era hacer algo que llamara la atención a los espectadores y no se le ocurrió otra cosa que contratar a dos chicos guapos, Álex González y Alberto Ammann, para el público femenino, y a una joven de buen ver, Adriana Ugarte, que aunque tampoco es que sea espectacular, va sexy con esos vestidos ajustados y esos zapatos de tacón.

El caso es que de esta forma tiene distraído al personal mientras que nos coloca una trama que al principio no sabes por dónde va a salir pero que luego se hace muy vista. Tampoco está mal, por más que no acabo de entender por qué al protagonista le ponen una novia, eso sí, más fea que la "tentación", porqué sino, qué sentido tendría. De esta forma, además de quedar él como un guarrete y luego como un tonto, el desarrollo se ve precipitado. ¿No hubiera sido mejor que no tuviera a nadie? Sea como fuere, se deja ver aunque en la recta final se precipiten, dejando cabos sueltos, ¿quién es el soplón? o con un desenlace entre pasteloso e inmoral. Eso sí, atención a las "frenéticas" carreras a 5 kilómetros por hora. Menudas risas.