Viajamos de Taiwán al espacio exterior para una aventura de ciencia ficción bajo la fórmula de metraje encontrado. "Europa One" bebe un poco de clásicos como "Alien" (1979 y su continuación de 1986, el resto no existe), "Esfera" (1998) o algunos trozos de "2001: Una odisea del espacio" (1968), para contarnos la expedición a un satélite de Júpiter, Europa, donde se ha encontrado agua y posiblemente vida. Sin embargo, se nos estrella con problemas desde el comienzo. No en vano, a los siete minutos exactos, propuse seriamente quitarla porque la pinta que tenía de peñazo monumental era de campeonato. Por desgracia, no he logrado convencer y he tenido que sufrirla hasta el final.

Para empezar, la película parte de un formato, el found footage, que como técnica se puede usar pero que rara vez funciona bien. En esta ocasión no lo hace, siendo a menudo más importante lo que sucede fuera de campo que lo que enfocan y hace que la obra sea más estática, lenta y pesada de lo que ya es por sí. Aquí se ve claramente que se ha recurrido por falta de presupuesto. Sin embargo, más grave aún es la incapacidad de narrar de forma fluida una historia que tiene posibilidades pero que se embarra ni más ni menos que durante una hora con constantes explicaciones y banalidades. Al final mejora algo pero el aburrimiento, desinterés y desidia que ha causado ya, la mata.