Después de una tercera parte que nos aparece como un simple pegote, ¿es que pensaban finiquitar la franquicia?, regresan para esta "Fast & Furious: Aún más rápido" o "A todo gas 4" los protagonistas de la original: Vin Diesel, Paul Walker, Jordana Brewster y Michelle Rodríguez, la cual me ha parecido más atractiva que de costumbre, por supuesto, más que Jordana, que me temo que sólo me gustó en "The Faculty" (1998) más por el personaje que interpreta, la chica más popular del instituto, que por ella misma. O también puede ser que los once años transcurridos no le hayan favorecido demasiado. Por cierto, ojo al detalle del nombre del personaje de Michelle: Leticia Ortiz, la okupa del palacio de la Zarzuela por la vía matrimonial.

Ahora bien, Justin Lin, que como se nombre indica es chino, de Formosa para ser exactos, además de coger carrerilla y dirigir de una tacada desde la tercera a la sexta de "Fast & Furious" y de reunir a la "familia", construye un producto que si bien no es nada imaginativo, sí es sólido y serio, sin perder por ello ni velocidad en las carreras, ni chulería en sus héroes por más que Vin Diesel actúe peor que nunca. Al menos a Paul Walker le ponen un traje, a petición popular femenina. La película, como se arrima argumentalmente, al igual que la del 2001, a las espléndidas "Le llaman Bodhi" (1991) y "El Clan de los Irlandeses" (1990), más la segunda que la primera, le acaba saliendo un trabajo decente, aunque lejos de los films mencionados.