Le debo mucho (películas que me faltan por ver) al llamado nuevo cine alemán. Cuando pienso que esta película rodada netamente en Norteamerica es considerada de la antigua Alemania Oriental se me cruzan los cables de manera virtuosa. Simple pero arrolladora, Paris Texas toma su tiempo para desarrollar sus personajes con sutileza, es posible que en los primeros minutos sintamos que este es uno de esas películas de autor que no cuenta nada o que cuenta muy poco. Más equivocado no podríamos estar. Aquí la recompensa está en la media hora final, en donde entendemos los propósitos y el desarrollo de nuestro peculiar personaje (genial Harry Dean Stanton) , puedo decir sin duda alguna que esa escena en el peep-shpow es una de las mejores secuencias que he visto en una película, te arrastra a una realidad tan brutal y está actuada con un naturalidad tan empática. Wenders dirige de una manera magistral el filme que se mezcla entre el drama familiar y las road movie, algunos planos son preciosos. El final como dije, es cuento de otro saco, uno de los mejores finales. Hay culpas que se pueden corregir pero que cuestan demasiado caro. Desde ya en mis películas favoritas de toda la vida. IMPERDIBLE.