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España España · Estrada
Voto de Sharla:
4
Drama Jack Cunningham es una antigua estrella del baloncesto caída en desgracia, separado y sumido en el terrible mundo del alcohol, que trata de volver al sendero correcto como entrenador de un equipo de instituto cuya mayor peculiaridad es estar compuesto por un variopinto grupo de estudiantes sin demasiado talento. Quizá enseñar a luchar en la vida a los chavales es lo único que le remita el dolor por el que bebe todos días a todas horas. (FILMAFFINITY) [+]
26 de mayo de 2022
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
En el año 2017, el bueno de Ben sufrió una recaída en su adicción al alcohol. Y que mejor manera de redimirse ante los fans y moral americana que rodar una disculpa en forma de película titulada “The Way Back” dos años después. Un producto "prêt-à-porter" realizado a la justa medida del actor, sobre la experiencia vivida y su profundo arrepentimiento.

The Way Back aprovecha el sensacionalismo que generó la adicción real de Affleck y nos vende una película plana, insulsa y llena de tópicos americanos. No importa, el verdadero interés del director es mostrar el morbo de Ben Affleck bebiendo ingentes cantidades de alcohol, como se supone habría sucedido en la vida real. Mientras tanto, la trama se desarrolla a sus espaldas de puntillas y en un intrascendente segundo plano, diluida entre las borracheras y resacas del protagonista.

La historia se centra tanto en el acto de beber en sí que deja el baloncesto de lado, el eje principal de la película. A mayores, convierte al resto de actrices y actores en meros palmeros del protagonista. La familia, amigos, compañeros de trabajo, de borrachera, etc., están presentes para dar cobertura a la soberbia actuación de Ben Affleck. En ese campo el actor da un recital de interpretación, demostrando que ahora mismo está a un nivel más que sobresaliente para sacar adelante y brillar en cualquier papel que se le presente.

En líneas generales, la película aburre por que realmente no es una película, sino un obligado acto de contrición del actor ante la opinión pública americana. Y, de paso, cuela una sorda puya a sus inquisidores jugando la baza de la justificación moral: Las adicciones son todas malas, pero algunas se explican entendiendo las circunstancias sociales y personales que rodean al individuo en cuestión. Es decir, el protagonista bebe y comete un error al beber. Pero también tiene muchos motivos para hacerlo.
Sharla
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