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Voto de Michael Myers:
8
Fantástico. Aventuras. Acción En la Tierra Media, el Señor Oscuro Sauron ordenó a los Elfos que forjaran los Grandes Anillos de Poder. Tres para los reyes Elfos, siete para los Señores Enanos, y nueve para los Hombres Mortales. Pero Saurón también forjó, en secreto, el Anillo Único, que tiene el poder de esclavizar toda la Tierra Media. Con la ayuda de sus amigos y de valientes aliados, el joven hobbit Frodo emprende un peligroso viaje con la misión de destruir el ... [+]
5 de agosto de 2022
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hacía no se cuantos años que no me dejaba caer por la Tierra Media y este ha sido un buen momento para volver a revisionar la que muchos considerarán la mejor trilogía de la historia del cine (opinión personal, ese lugar corresponde a la trilogía de 'El padrino') y una de las grandes obras cinematográficas en el género de aventuras, y esto sí está fuera de toda duda.

Peter Jackson empezó en la dirección cinematográfica de manera humilde con películas como 'Mal Gusto', 'El delirante mundo de los Feebles' o 'Braindead (Tu madre se ha comido a mi perro)', filmes con toques muy gamberros hechos con medios modestos, pero con toda la intención de hacerse notar, y así lo hizo. Tanto que confiaron en él para adaptar las novelas de J.R.R. Tolkien, nada menos. No creo descubrir el fuego cuando digo que la prueba (siempre ceñido a esta primera parte, pero es harto difícil que las revisiones de 'Las dos torres' y 'El retorno del rey' sorprendan negativamente) la aprueba de forma holgada.

Es cierto que esta primera aventura es la menos ambiciosa en referencia a que cuenta con un reparto que mayormente se centra en los protagonistas con la aparición de secundarios de lujo y no cuenta más que con pocas escenas de aventuras o lucha. No es menos cierto que uno de los mayores valores es no marear con escenas sin ton ni son y para narrar el relato se toma su debido tiempo, dando al espectador la oportunidad de ver sin prisa, pero sin pausa, los sucesos en los que se verán envueltos Frodo, Sam, Gandalf, Aragorn, Legolas, Gimli y compañía.

Además, a la ecuación hay que añadir un cuidadísimo apartado visual y sonoro (fotografía, dirección artística, efectos especiales, vestuario, maquillaje y la banda sonora compuesta por Howard Shore) que rentabiliza cada dólar metido en cada uno de estos apartados haciendo del filme todo un lujo para la vista; además del, por supuesto, reparto lleno de actores de lujo que hacen difícil que empeoren un largometraje y, en efecto, sus interpretaciones encumbran aún más el resultado final tanto individualmente como en términos de química entre ellos, cosa nada baladí ya que gran parte del metraje algunos de los personajes pasan las aventuras juntos.

Intentar analizar más esta producción con el estatus que ha obtenido desde su estreno y a lo largo de dos décadas es harto difícil. Creo, eso sí, que con todo lo dicho en los párrafos anteriores ya da una idea aproximada, aunque al camino aún le queda recorrido divisando en el horizonte dos torres.
Michael Myers
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