Tenía curiosidad desde hace tiempo por esta película. Ya sabía que no me iba a encontrar una obra cumbre del género de ciencia-ficción, pero las presencias de Estévez, Hopkins y, especialmente, Mick Jagger hicieron que arquease una ceja (metafóricamente, no tengo la habilidad de Carlo Ancelotti o Carlos Sobera) ante esta propuesta del director neozelandés ya fallecido Geoff Murphy.

Efectivamente, lo que esperaba es lo que ha terminado sucediendo en uno de esos casos de lo que esperas es lo que ves.

Ignoraba la participación en el guion de Dan Gilroy (marido de la aquí presente Rene Russo, imagino que esta película tuvo algo que ver en su unión) y de Ronald Shusett, una de las mentes creativas detrás de 'Alien, el octavo pasajero' o 'Desafío total'. Seguramente sea por estos dos nombres, entre otros en otros campos, que 'Freejack (Sin identidad)' sale del paso sin mucho sufrimiento.

Está bastante bien la premisa de los viajes en el tiempo bajo la idea de ser de atrás hacia delante (en lugar de al revés, como suele ser habitual) y con la idea del transhumanismo de fondo, si bien explotado a su manera para encajar en el guion. No cuenten con reflexiones filosóficas sobre el asunto porque no lo van a encontrar. Este filme está hecho básicamente para entretener con los rostros presentes más Rene Russo como interés amoroso del protagonista y aliada cuando estén persiguiendo a Alex Furlong (Estévez), siendo uno de sus principales perseguidores un cazador con el rostro de Mick Jagger.

Nunca había visto a Jagger interpretando y hay que decir que, aún siendo el material de calidad normalita, es palpable que no está por estar y no sale perdiendo en lo que a este largometraje respecta con respecto a sus compañeros de reparto más experimentados y talentosos. Anthony Hopkins es uno de esos compañeros con una presencia más de gancho comercial que aprovechable en uno de esos papeles que hasta el más alto nivel de actores tiene que son trabajos alimenticios interpretados con el piloto automático; queda muy por debajo del inmenso talento del actor de 'El silencio de los corderos', pero también hay que comer.

La representación futurista del ya sobrepasado año 2009 tiene su aquel mezclando futuro brillante y barrios más difíciles, aunque en términos de dirección artística no se acerca a referencias como 'Blade Runner'. Al menos, el encanto no se lo quita nadie.

Una película la que nos ocupa que está hecha para entretener y no pensar y ese cometido lo cumple sobradamente entre elenco, dirección artística y banda sonora de Trevor Jones más toques de calidad salteados del libreto a pesar de sus conveniencias. Sin duda se podía haber hecho bastante mejor, pero el resultado no es especialmente grave y con eso me quedo.