Aceptable secuela de la famosa franquicia de Halloween. Esta cuarta parte es una digna continuación que narra las sangrientas correrías de Michael Myers. Han pasado 10 años desde los terribles sucesos de Haddonfield. Aquella noche Myers asesinó a 16 personas. La película retoma la acción donde la dejó la segunda parte ya que la tercera no tiene nada que ver con el argumento de las otras. En esta ocasión el sangriento psicópata es trasladado desde un hospital psiquiátrico de alta seguridad, momento que aprovecha para escaparse y regresar a su ciudad natal para proseguir con sus asesinatos.

La película vuelve a estar interpretada por Donald Pleasence como el famoso doctor Loomis que perseguirá a Myers sin tregua. Daniele Harris encarna a la sobrina del psicópata y se convierte en su principal objetivo. El filme contiene algún que otro susto y algo de acción. Tiene una turbadora banda sonora obra del compositor del tema original Alan Howarth y el popular tema de John Carpenter vuelve a sonar con fuerza. Los efectos especiales no están mal aunque los sonoros son un poco potrosos, sobre todo, el sonido de los disparos. La película está casi al nivel de la primera y se deja ver si eres aficionado al cine de terror.