Un elenco de veteranos actores protagoniza esta apañada película de terror. Cuenta la historia de cuatro ancianos que pertenecen a una sociedad gastronómica y que suelen reunirse para contarse historias de terror. Sin embargo, uno de ellos y su hijo mueren en extrañas circunstancias. El otro hijo del fallecido investiga lo sucedido y finalmente los otros tres ancianos deciden contarle un oscuro secreto del pasado.

A la película le cuesta empezar y se hace algo lenta y pesada. Por un momento crees que es otra bobada impresentable, sin embargo, a medida que avanza el argumento, cuando se cuenta la historia de la muchacha, la película toma otro cariz y se vuelve más interesante. El final me decepcionó porque me dejó indiferente. Los efectos especiales de maquillaje están bien elaborados aunque hay una escena al comienzo, cuando el hermano del personaje encarnado por Graig Wasson cae por la ventana, que es bastante cutre. Se puede ver sin más para los amantes del cine de terror sin esperar demasiado.