Tras haber leído otras críticas, me esperaba algo bastante más malo de lo que he visto.
Una película que refleja los pensamientos de la sociedad americana de los 50 en cuanto a las personas con discapacidades físicas, dirigiéndose en el fondo a todos, veteranos y no.
Qué decir de Brando... Cuando le veo me hipnotiza, no puedo ver otra cosa. En esta película, está fantástico para ser su primer papel, pero creo que su actuación se magnifica gracias, precisamente, a los compañeros de la sala del hospital. Se nota mejor el contraste y la tristeza y angustia que quiere trasmitir.
En fin, es una película sencilla y predecible, pero que seguramente tuvo una gran carga social en los años en los que fue rodada. Merece la pena.