Esta es una de esas películas que se ha mitificado sin merecerlo. Un auténtico caos narrativo, con un guión que carece de sentido, con un nulo conocimiento matemático por parte de los guionistas y que te hace estar preguntándote todo el rato por qué sigues viéndola y como puede tener una nota tan alta una película tan mala.

Uno espera encontrarse una película entretenida sobre un matemático, y lo que se encuentra realmente es una paranoia propia de un exceso de tripis. Huye de lo humano y parece más una pesadilla de Kafka llena de insectos en vez de personas.