Acabo de ser testigo de una de las injusticias más grandes de la historia del cine. Resulta que el director nos quiere vender la moto de que esta película esta montada a base de grabaciones reales de la investigación de la psiquiatra de turno junto con partes de la película realmente rodada para contarnos la historia completa. Por un lado las grabaciones en teoría de la historia real y por otro la dramatización con actores.

Y digo la mayor injusticia de la historia del cine porque los espectadores vamos a recordar a actores muy mediocres en esta peli como Milla Jovovich, Elias Koteas o Will Patton cuando está claro que las actuaciones de los supuestos abducidos en la realidad hacen un papel mil veces mejor y más creible. Las imágenes reales dan muchísimo mas yuyu que la película real. Lo cuál simplifica la crítica en "no es una película de miedo, es un documental de terror". Primero: me cuesta trabajo creer que las imágenes del documental sean reales. Siempre se borran en el momento cumbre y el sonido se corta en lo mejor. Segundo: si vas a contarnos la historia de una abdución extraterrestre, o haces un documental o una peli, pero coño, no lo mezcles que te sale un esperpento y además me rallas. Tercero: los actores se me tragantan. Cuarto: no lo pongas como peli de terror porque estás insultando a un género completo del cine.

A oscuras, solo en casa y con dos canutos en el pecho seguro que lo pasas mal viéndola, pero ojo, no por la historia y lo que cuenta, si no por el viejo recurso del susto o grito en el momento de tensión, ese que te hace dar un respingo en el sofá pero que te sucedería lo mismo si de repente llaman al timbre de la puerta. Mucho más barato y más realista que el 3D.

Película larga y aburrida salvo contados segundos. Milla Jovovich está bien para ser la imagen de L´Oreal o Pantene pero la interpretación es mucho más que una cara bonita, aunque es la única que está de miedo en la peli. Al César lo que es del César.

Floja a muy floja con posibilidades de mala.