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España España · Madrid
Voto de Charles:
6
Terror. Thriller Una mañana de 1940 en Nueva Inglaterra, la población entera -572 personas- de Friar New Hampshire salió a caminar juntos por un sendero sinuoso de los bosques cercanos. Dejaron atrás sus pertenencias, su dinero, todo lo esencial, incluso los perros fueron abandonados atados a postes y dejados morir de hambre. Nadie sabe el por qué. Un grupo de búsqueda enviado por el Ejército de los Estados Unidos descubre los restos de cerca de 300 ... [+]
18 de agosto de 2017
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Pocas veces se encuentra uno con algo como 'YellowBrickRoad'.
Donde una gran mayoría de películas de "terror" optan por hacerse comprensibles, por dar forma tangible a un mal difuso... esto es un viaje, y el destino no lo sabemos.

Un pueblo entero desapareció en los bosques de Nueva Inglaterra hace varias décadas, y de entrada se nos muestran los únicos testimonios que quedan de ellos: fotos de informes que recopilan bajas, de consumidos supervivientes, apuntando a la espesura del bosque... hasta un audio de inquietante locura.
Son esos elementos los que más tarde impregnan veladamente la nueva expedición a aquellos bosques, y acompañan a los excursionistas que quieren desentrañar el misterio de lo que sucedió.
¿Podría revelarse qué pasó, verdad?
Al fin y al cabo cuentan con GPS, equipo de excursión, comida... no son como aquellos colonos que se lanzaron al bosque sin nada preparado.

Pero no importa tanto el "cómo" se adentran en el bosque, sino el "qué": allá en plena naturaleza las direcciones se confunden y se ensanchan, los problemas parecen más graves de lo que son y una atmósfera siniestra flota en el ambiente silencioso.
El paralelismo levemente establecido con 'El Mago de Oz' no es casualidad, porque estos investigadores también buscan a alguien que les pueda explicar, y de paso que dé una suerte de sentido a lo sobrenatural, como aquel hombre de carne y hueso que se ocultaba bajo el nombre de un temible hechicero.
Lastimeramente, los días pasan y las explicaciones de carne y hueso no aparecen, al contrario: la cordura escapa del camino de baldosas amarillas, pero las personas, salvajes y confundidas, se quedan.

No miento si digo que hasta muy entrados en el camino la cosa se puede ver sin mucha curiosidad, e incluso con cierto tedio.
Aunque eso solo es el escenario perfecto para empezar a lanzar punzadas de incomprensible terror más tarde, que enrarecen la expedición y a medida que se repiten hacen perder la conexión con la realidad, hasta que todo lo que sucede en el camino se vuelve... ¿normal?
Algo tan sencillo como eso dota de una desesperante sensación de angustia a este casi documental, cuando todo lo que empiezan a recordar los excursionistas es que tuvieron el sueño lejano de que iban a desentrañar un misterio, y han acabado en el hogar que les brinda la espesura, la locura y el brillante sol.

No digo que sea algo nunca visto, ni una maravilla.
Pero sí es un experimento sostenido y novedoso, que enfoca el terror como un pequeño pinchacito en nuestra espalda, hasta que lleguemos al punto de no retorno en que nos hayan clavado la aguja entera, y sigamos pensando que estamos bien.
Porque nada da más miedo que la normalidad cuando es corrompida, sin que se puedan apreciar las diferencias para escapar de ella.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Charles
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