Algunas películas están mejor, otras peor pero, a la larga, lo que no es fácil es encontrar películas que realmente te atrapen con su contenido hasta el punto de emocionarte con su historia. “Un puente hacia Terabithia” consigue eso, cautivar al espectador con unos personajes que importan y con una trama que emociona. La propuesta que nos ocupa, siendo una aventura familiar sin grandes complicaciones, trata temas como la amistad, el amor, y el poder de la imaginación, y lo hace con éxito, consiguiendo dejar un poso en el espectador.

La cinta se desarrolla con un tono agradable que mezcla aventuras, drama y comedia, siendo probablemente el drama lo que predomina algo más. Con todos los ingredientes mencionados hasta ahora se construye una historia entretenida, donde uno de los mayores logros es que todo se desarrolla con bastante solidez, consiguiendo que los personajes y las situaciones que viven nos importen. Ahí es donde notamos que los personajes funcionan bien dentro de lo que se nos pretende contar, desde los protagonistas interpretados por Josh Hutcherson y AnnaSophia Robb, hasta el resto de los secundarios que llegan a tener algún papel relativamente importante en la historia.

Sin revolucionar nada, ni ser sobresaliente a nivel puramente audiovisual, “Un puente hacia Terabithia” me parece una película familiar de aventuras imprescindible. Una historia muy bonita sobre la amistad y el poder de la imaginación.