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España España · Sevilla
Voto de moray33:
6
Drama. Comedia Caden Cotard (Philip Seymour Hoffman) es un director teatral que proyecta representar una obra utilizando una réplica de Nueva York, de tamaño natural, dentro de un almacén. (FILMAFFINITY)
23 de junio de 2013
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Charlie Kaufman se convirtió en uno de los guionistas más reconocidos gracias (especialmente) a los libretos de “Adaptation (El Ladrón de Orquídeas)”, “Cómo Ser John Malkovich” y “¡Olvídate de Mí!”… Un tema que se ha debatido bastante es la autoría de esas películas, si son más obra de sus directores (Spike Jonze o Michel Gondry, según el caso) o del propio Kaufman, ya que en todas está presente su estilo, y la repercusión del guionista es, sin duda, mayor que en la gran mayoría de las películas.

Visto lo visto, parece que este excepcional guionista y sus “directores colaboradores” se han divorciado (al menos de momento). Spike Jonze es aún una incógnita cómo trabajará en solitario, pero Michel Gondry ha demostrado que por su cuenta es capaz de hacer grande películas (“La Ciencia del Sueño”) y que tiene una gran imaginación y capacidad de hacer cosas visualmente asombrosas de manera completamente artesanal (“Rebobine, por Favor”). Kaufman no iba a ser menos, y se ha lanzado a dirigir un guión propio en esta ocasión, aunque seguramente esperaba un mejor resultado que el conseguido finalmente, al igual que nosotros los espectadores…

En la película está presente el surrealismo, propio de las obras de Kaufman, aunque en esta ocasión hay más confusión en espectador de la que debería, y tampoco es porque la historia sea más intrincada que en otras obras de este autor. El problema es que hay veces en las que uno queda un tanto desconcertado ante ciertas cosas que ve en la película, y no se encuentra una explicación o un sentido… El surrealismo puede ser un instrumento para hacer cosas muy interesantes, y posiblemente esto está demostrado mejor que en ningún otro sitio en películas escribas por Charlie Kaufman, pero en esta ocasión es un lastre para el film en algunos momentos. Por otro lado, tras la cámara se ve que este hombre no se desenvuelve igual de bien que tras el teclado, la máquina de escribir o el bolígrafo, ya que estamos ante una dirección irregular, un tanto apática por momentos y que no termina de enganchar al espectador.

Philip Seymour Hoffman realiza un buen trabajo, y del reparto en general no se puede hablar mal… Salvan la papeleta, lo que seguramente no les ha sido muy fácil, ya que más de uno andaría algo perdido.

Como curiosidad es interesante de ver, aunque es la película más floja escrita por Kaufman (incluidas “obras menores” como “Human Nature” y “Confesiones y una Mente Peligrosa”). Y, desde luego, es una película tan pesimista que, si no estás en tu mejor momento, tampoco sería una mala opción evitarla…
moray33
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