El omnipresente tema de la Guerra Civil en otra película española, si bien está interesante por analizar las causas previas al conflicto y presentarlo como un drama de época a partir de una obra literaria que no he podido leer pero que seguramente sea mejor que este film. La interpretación de Miguel Bosé no destaca, es más, a veces es demasiado hierático. Antonio Ferrandis retrata muy bien al típico padre sobreprotector y mandón pero impotente al ver cómo la guerra afecta a su familia, su negocio y su país. Mónica Randall en su época destape nos enseña a una amante madura interesante pero con poco protagonismo en la trama para lo supuestamente importante que es a la hora de dibujar la personalidad del personaje protagonista de Bosé. Esta irregularidad interpretativa, sumada a un ritmo de narración vago (con mucho intercambio de escena que te deja un poco descolocado) y la factura técnica limitada (esto último típico de la época en España, eso sí) nos da un film que, visto ahora, se queda muy poca cosa. Sólo recomendable para curiosos del cine político español de los 70s y 80s.