Puede que la apuesta de Ned Benson sea vista por varios pasajes como rara, extraña y dispersa, pero "La desaparición de Eleanor Rigby" (2014) guarda una profunda sensibilidad dentro de esa maraña que son las emociones humanas, confusas y complejas.

Esta sinfonía fílmica que originalmente son tres cintas: "Ella", "Él", y "Ellos", lo que logra es contar una historia de vida compleja, de modo poco convencional, quizás guardándose en su montaje parte del mismo secretismo que sigue a sus protagonistas por no tocar un dolor inconmensurable dentro de su vida como pareja.

Algunos podrán recordar "El árbol de la vida" (2011) donde la Chastain se repite el plato, pero en esta pasada el desamor, la sobrevivencia del querer y los afectos que perduran con el dolor a cuestas son la premisa que da forma a una pieza interesante pero no recomendable para todo público.

Discrepando de algunas de las referencias que cita en su publicidad, esta película no es particularmente romántica, de hecho es más bien para públicos maduros. Este segmento puede sopesar mejor la densidad de ciertos momentos, las profundas reflexiones de otros y perdonar las lagunas para interpretarlas como pausas que le dan realismo al film.

En síntesis, "La desaparición de Eleanor Rigby" es un repaso al desamor, la ruptura producto de un dolor y las reflexiones de la vida, donde ayuda mucho Jessica Chastain y sin ser injusto, también los fans de James McAvoy se verán complacidos.

Recomendación:
Interesante. Una obra de sensibilidad, densa y mejor entendida por públicos maduros.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski.wordpress.com