Por fin acaba la película. Sensación de alivio. Me he aburrido en algunos tramos. Prefiero olvidarlo, pero creo q he mirado la hora después del barco. Salgo del cine. A ver, qué demonios ha pasado aquí?. Casi es lo que le pregunto a la otra persona de la sala, pero me he frenado a última hora porque no quería contaminarme. Venga voy…yo solo…a ver esas velas sucias…
He visto en ella mucho Buñuel, muchísimo, no me creería que Ostlund no haya visto 20 veces, El discreto encanto de la burguesía, El ángel exterminador o Ese oscuro objeto del deseo. Mucha crítica social, económica, relaciones de pareja…pero poco sutil, muy descarada, en definitiva poco inteligente.
Ostlund se que nos quiere incomodar, una de las marcas de la casa, y esto si lo consigue, aunque un poco menos que en The Square, q es el súmmum de la incomodidad y del cine en general de los últimos 10 años.
Todo crece cuando aparece (en persona) Woody Harrelson, que hace que todo luzca mejor, con mucho empaque cómico y una gran escena de frases célebres de capitalistas y anticapitalistas.
Pero en general me ha saturado. Tanto surrealismo, tanta critica velada, tanto esnobismo, no soy tan listo para pillar tantas situaciones locas, extrañas y subjetivas. Suelo aguantarlas bien, por lo que creo q no es culpa de mi intelecto sino de Ostlund que se ha pasao…seguro que queriendo…
Pero a pesar de todo ello, ya no se si bueno o malo, lo que más valoro de estas pelis raras de súper autor es que me sacuden mucho en el post, divago, reflexiono, escudriño el porqué de cada plano…En definitiva me hacen pensar e intentar descubrir cosas que parecen escondidas solo para mi.