Lo primero es decir que no sabía que era un remake hasta que he visto la ficha de la película, así que no puedo comparar con la original.
Es un thriller muy bien llevado en el que Crowe tiene a su mujer encarcelada injustamente y elabora un sofisticado plan para liberarla.
Paul Haggis mantiene el interés prácticamente desde el principio. Los actores están bastante bien. Me ha sorprendido bastante Elizabeth Banks, de la que no he visto muchos dramas y realiza un buen papel. Tienen bastante dramatismo las escenas de las visitas carcelarias.
Aunque el plan de escape no sea tan complicado como en la mayoría de películas de cárceles, es interesante ver cómo se las apaña este padre de familia en solitario para lidiar con esta situación.
También aparece fugazmente Liam Neeson, el omnipresente, que sale tan poco que no sé ni por qué aparece en los créditos como si fuera uno de los principales.
Una película más que interesante que engancha lo suficiente para que uno no se dé cuenta de que dura más de dos horas.