Al ver la película uno se siente transportado a la inocente época del Instituto, tan bien montada y realizada está que te sientes un alumno más de esta clase tan heterogénea, por algo Francia tuvo tantas colonias y en la clase hay chavales de Mali, las Antillas o Marruecos. El profesor protagonista se enfrenta a un nuevo curso e intentará convivir de la mejor forma con unos chicos, el roce es inevitable, son chicos de diversa procedencia, con diferentes culturas pero son todos franceses al fin y al cabo. No tiene nada que ver con la típica película de una clase marginal con chavales peligrosos, esta película está muy bien hecha y muy realista.

Sin embargo, y a pesar de que ya he indicado que está muy bien realizada y montada tiene una historia que no engancha, de hecho, creo que los autores querían que te conmoviera e intentan que llegues a una reflexión profunda pero la historia falla, y el guión siempre suele imponerse al montaje y tanto pierde la historia que al final sólo le he puesto un 6. Película interesante y didáctica, ideal para el visionado en cualquier ambiente de estudio, lamentablemente, no tan interesante para el gran público.

La clase es un meteorito que arranca con una fuerza descomunal y llegas a considerarlo seriamente, sin embargo, cuando toca tierra se convierte en una piedra más.

(Entre les murs es el título original y me quería dar el pegote de que domino el idioma francés)