"ENCANTO" es visualmente abrumadora, con un nivel de animación fantástico, efectos sobresalientes (como el de la corriente del agua del río, transcurriendo a distintas velocidades), un cuidado y detalle extremos en los textiles (atentos al vestido de la protagonista, donde los encajes y bordados parecen salirse de la pantalla) y con una banda sonora con algunos números musicales sobresalientes entre los que despunta el magnífico "No se habla de Bruno" ("We Don't Talk About Bruno", en la VO) o el también estupendo "Inspiración" ("What Else Can I Do"), aunque hay un número que sobra ("En lo profundo", titulado "Surface Pressure" en la VO) y otra canción que es una absoluta cursilada y a la que solo salva la dramática historia muda de la abuela en su juventud ("Dos oruguitas").

Pero a "ENCANTO" le flojea, como ya le ocurrió a Disney en "Frozen 2", la historia y, en concreto, lo relativo a los "dones" o poderes de la familia Madrigal. En ningún momento se explica por qué los tienen más allá de la dichosa vela mágica y por qué esta lo es (lo siento, pero a mí todo eso del "realismo mágico" no me convence, me gustan las explicaciones "lógicas" aunque sean en un contexto de fantasía), pero tampoco queda claro qué aportan realmente al bienestar de la comunidad el florido "don" de Isabela, la capacidad de Camilo de mutar en cualquier otra persona o el que Antonio pueda comunicarse con los animales. En realidad, los únicos que parece que sí sirven para algo son los poderes de curandera alimenticia de Julieta (la madre de Mirabel) y la fuerza de Luisa, ya que lo de Pepa y el tiempo parece más relacionado con su estado de ánimo que con las posibles necesidades climatológicas del pueblo. Y ya, completamente desaprovechada en el guion, la capacidad de ver el futuro de Bruno que, empleada con "lógica", haría innecesarios casi todos los demás "dones". Todo esto apunta a que Disney, de nuevo, ha priorizado el aspecto técnico y el musical estilo Broadway sobre la coherencia de la trama, estando la mayoría de los personajes y sus características al servicio de los primeros y no de lo segundo.

Sin embargo, "ENCANTO" es una estupenda película de animación y un buen musical (con las excepciones señaladas) y por eso le pongo una buena nota. Ah, a los que se quejan de que muchas letras "no se entienden", les animo a que las escuchen fuera de la película, en Spotify o en Amazon Music y verán que las entienden perfectamente. Y también sugiero a todos los aficionados al género que vean la película en versión original en inglés, sobre todo las canciones (la cursilada esa de "Dos oruguitas" está en español en la VO, al igual que "Colombia, mi encanto"), pues la sincronización con los movimientos de los labios de los personajes es perfecta, cosa que no ocurre con la versión "colombiana" (en realidad, mexicana), aunque hay que decir que en esta ocasión se nota que los compositores eran capaces de manejarse en los dos idiomas y se disfruta más de la versión latina que en ocasiones anteriores como "Frozen".