Media votos
7,0
Votos
5.571
Críticas
691
Listas
41
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de RAMON ROCEL:
6
6,1
514
Drama
Cuando el gobernador de la prisión situada en un país imaginario de la América latina es asesinado, su secretario, Ramón Vázquez, asume el rol de gobernador en funciones a la espera que llegue el nuevo mandatario. Vázquez, un idealista, aprovecha esta oportunidad para intentar mejorar las condiciones de los prisioneros y empezar una relación con la viuda del antiguo gobernador, Inés. (FILMAFFINITY)
13 de mayo de 2010
7 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película, una hija no deseada de Luis Buñuel, ciertamente nos aburre, pues su trama resulta muy enredada y al fin la confunde al espectador. Como que no cuaja muy bien una buena historia llevad a la pantalla. Y solo la actuación de María Félix, y Gerard Philipe, Miguel Ángel Ferriz y Víctor Junco, salvan en parte este film que bien pudo convertirse en algo mítico.
En la época en que las dictaduras nacían y se reproducían a lo largo y ancho de América latina, como criaturas perniciosas bajo el plan Marshall y la doctrina Truman. Vemos el tinte trágico de los condenados, de los presos políticos en lugares como “La isla del Diablo” en la Guyana Francesa. Y colonias como esta representada en “Los ambiciosos”. Una historia desperdiciada en algo que quizás se hubiera dado por parte del espionaje, y la fiebre de María subiendo al Pao, hubiéra resultado otra cosa.
En la época en que las dictaduras nacían y se reproducían a lo largo y ancho de América latina, como criaturas perniciosas bajo el plan Marshall y la doctrina Truman. Vemos el tinte trágico de los condenados, de los presos políticos en lugares como “La isla del Diablo” en la Guyana Francesa. Y colonias como esta representada en “Los ambiciosos”. Una historia desperdiciada en algo que quizás se hubiera dado por parte del espionaje, y la fiebre de María subiendo al Pao, hubiéra resultado otra cosa.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
“Era la última noche de Karim en Cuba y termina el show en el "Night Club Tropicana" en la Habana. En la mesa de Karim estaba Ramón Vázquez, un hombre de hablar pausado y mirada reflexiva. Vázquez era un enlace que había estado mucho tiempo asignado en Francia y en esta ocasión había viajado hasta Cuba para enlazar a Karim.
Ramón Vázquez era alto y su disfraz pefecto era un diplomático de la “Union Recovery Company”.
Tal como lo suponían. A las dos Pm; un hombre bien vestido, de rostro demacrado llegó hasta una mesa en lado opuesto del salón en donde se encontraban Karim y Vázquez.
-Ves a ese hombre de traje azul- dijo Ramón a Karim, en voz baja y señalando al hombre -es un verdadero reptil, un bastardo sin escrúpulos, un tirano, es nuestra presa.
Era el títere en turno en la gubernatura de la isla del diablo. Un dictador que ya no era útil en el poder. Era como es lógico, cuidado por su esbirro Sandro, que le observaba desde una mesa cercana.
Sandro: un sicario de origen español, adiestrado en Sudamérica desde muy joven por guerrilleros rebeldes y luego por expertos escoltas de empresarios hoteleros. Ahora al servicio del dictador. Un pistolero con preparación, no el clásico violento impulsivo. Un hombre muy peligroso al que había que quitar primero del camino y así poder llegar hasta el dictador que esa noche vestía de azul, ahí en el club Tropicana. Un dictador que Vázquez había estado siguiendo desde antes que esté llegara al hotel Nacional de La Habana y ahora le estudiaba también Karim. Un hombre llamado Gual".
Ramón Vázquez era alto y su disfraz pefecto era un diplomático de la “Union Recovery Company”.
Tal como lo suponían. A las dos Pm; un hombre bien vestido, de rostro demacrado llegó hasta una mesa en lado opuesto del salón en donde se encontraban Karim y Vázquez.
-Ves a ese hombre de traje azul- dijo Ramón a Karim, en voz baja y señalando al hombre -es un verdadero reptil, un bastardo sin escrúpulos, un tirano, es nuestra presa.
Era el títere en turno en la gubernatura de la isla del diablo. Un dictador que ya no era útil en el poder. Era como es lógico, cuidado por su esbirro Sandro, que le observaba desde una mesa cercana.
Sandro: un sicario de origen español, adiestrado en Sudamérica desde muy joven por guerrilleros rebeldes y luego por expertos escoltas de empresarios hoteleros. Ahora al servicio del dictador. Un pistolero con preparación, no el clásico violento impulsivo. Un hombre muy peligroso al que había que quitar primero del camino y así poder llegar hasta el dictador que esa noche vestía de azul, ahí en el club Tropicana. Un dictador que Vázquez había estado siguiendo desde antes que esté llegara al hotel Nacional de La Habana y ahora le estudiaba también Karim. Un hombre llamado Gual".